donostia - La Orquesta Sinfónica de Euskadi, bajo la batuta de su director titular, Robert Treviño, interpretará hoy la ópera El castillo de Barbazul, de Bela Bartok, una exigente partitura a nivel vocal y orquestal, dentro de la Quincena Musical, en un concierto que incluye obras de Pablo Sorozabal y Maurice Ravel.

La Suite vasca del compositor donostiarra abrirá este programa que comienza a las 20.00 horas en el Kursaal y en el que a la OSE se sumará la Coral Andra Mari de Errenteria. “Es una pieza llena de energía, especialmente exigente para los tenores y con la fuerza del folklore vasco que sustenta gran parte de la obra de Sorozabal”, señaló ayer Andoni Sierra, director del coro que fundó José Luis Ansorena, fallecido el pasado mes de mayo y al que se dedicará la velada. Tras las notas de esta obra, sonará Gaspard de la nuit, de Ravel, escrita originalmente para piano y que fue una de las pocas que el músico de San Juan de Luz no adaptó a la orquesta, un cometido que llevó a cabo en 1990 Marius Constant.

El castillo de Barbazul, considerada una de las piezas más interesantes del repertorio operístico del siglo XX, centra la segunda parte del programa con la israelí Rinat Shaham, reconocida internacionalmente como una de las mejores cantantes del rol de Carmen, de Bizet, en el papel de Judit, y el bajo Mikhail Petrenko, especialista en Wagner, como Barbazul, que la interpretarán en versión concierto.

“la fortaleza” de la orquesta Basado en un cuento “muy siniestro” de Charles Perrault, la ópera cuenta con dos únicos personajes: Barbazul y Judit, que va abriendo puertas y descubriendo los secretos y las atrocidades que se esconden en la verdadera personalidad de su esposo. Es una partitura que “exige un elevado grado de virtuosismo a cada uno de los integrantes de la orquesta”, indicó Treviño, quien explicó que después de tres años de trabajo “intenso” es “el momento” para adentrarse en el repertorio del compositor húngaro, que contará con una amplia presencia en el programa de abono de la orquesta la próxima temporada. “Es una gran obra con la que la OSE quiere presentarse ante el público de la Quincena Musical, que en ocasiones sólo escucha a la orquesta vasca en este ciclo, y con la que quiere mostrar el estado de fortaleza en la que se encuentra”, agregó el gerente de la OSE, Oriol Roch. - Efe