artes plásticas - Cuando Mariano Fortuny realizó en 1860 el primero de sus tres viajes a Marruecos, quedó fascinado por el paisaje y la cultura árabes, que le inspiraron para iniciarse en la técnica del grabado, en la que mostró su faceta más experimentadora, con un resultado visible en el Museo Carmen Thyssen de Málaga. La exposición presenta los principales grabados de los 36 que realizó en su corta vida Fortuny, fallecido a los 36 años, procedentes de la colección de Enrique Juncosa Darder. - Efe