protegido por las mareas. La bahía de La Concha se disfraza estos días de Carnaval de yacimiento arqueológico en busca del pecio de un barco antiguo, naufragado antes de 1753, junto a la barandilla de la mítica playa donostiarra. Arqueólogos de la Factoría Marítima Vasca Albaola, que desde hace años construye de forma artesanal una réplica de la nao del siglo XVI San Juan, se afanan desde ayer en prospectar la zona pendientes del régimen de mareas y con el límite temporal de mañana como plazo a sus operaciones.