- El pabellón de Mixtos de la Ciudadela de Pamplona acoge la exposición Imanol Bengoetxea, artista, una muestra monográfica sobre la obra del inédito y desaparecido artista barasoaindarra, que ha permanecido guardada en el sótano de la casa de la familia desde que su autor falleciera en 1994.

Bengoetxea (Andoain 1962-Barasoain, 1992), “profundamente creativo, innovador e inquieto, no recibió formación artística reglada, sino que aprendió por sus propios medios”, explica el Ayuntamiento de Pamplona en un comunicado. La elección de la primera planta del pabellón de Mixtos de la Ciudadela responde a las similitudes del espacio con el lugar de origen de la obra.

La historia de esta muestra comienza en la investigación desarrollada en los últimos meses sobre la obra de Bengoetxea, un autor hasta ahora desconocido. Desde el principio se tuvo la certeza de que lo que tenían guardado en los sótanos de la casa familiar iba más allá de las obras de un autodidacta aficionado a la pintura. A partir de esa idea se estudió y contextualizó todo lo que los hermanos de Imanol habían conservado desde su fallecimiento.

La conclusión de esta incursión, destaca el Ayuntamiento de Pamplona, es que esa obra “responde a una interesante personalidad, que conoce la historia del arte y bebe de las fuentes de su tiempo, pero que encuentra un lenguaje propio con el que expresar sus propias emociones y su visión de su universo más próximo, así como el interior de sus emociones y experiencia vital”.

A modo orientativo, se han distinguido tres etapas en el desarrollo artístico de Bengoetxea. La primera, de formación, finaliza hacia 1984-1985; la segunda abarca entre 1985 y 1990, y en la tercera y última muestra su madurez artística hasta su fallecimiento.

La fuerte personalidad de Bengoetxea quedaron reflejados en una obra con fuertes rasgos expresionistas y simbólicos, en los que el color, el gesto y la materia son los protagonistas. A través de la figura humana, que es su constante, refleja su universo interior. Variada en cuanto a los soportes utilizados que él mismo fabricó, en esta muestra se reúnen 210 obras entre las que se cuentan pinturas (134), dibujos (32), esculturas (31) y objetos (37) sobre los que intervino. No se han incluido los muebles que él mismo diseñó y construyó para el domicilio familiar.

El singular montaje de la exposición incluye la instalación, en el centro de las naves, de siete estructuras que permiten la correcta contemplación de las obras que el artista concibió a doble cara. La elección de la planta primera del Pabellón de Mixtos para exponer la muestra responde a las características de la sala, que en cierta medida reproducen algunos de los rincones de la casa familiar de los Bengoetxea, ubicación original de las obras.