- Tras su buena puesta en escena en el mano a mano con su padre del pasado jueves en Logroño, Guillermo Hermoso de Mendoza viajó a Jaén para participar en la Feria de San Lucas de Jaén, el único serial tradicional que se ha celebrado en la temporada en la península. Y lo hizo con un triunfo rotundo: obtuvo de su lote de dos toros un total de cuatro orejas y un rabo. La plaza jienense registró tres cuartos de entrada sobre el aforo permitido de dos mil plazas. Se lidió una excelente corrida de toros de los hierros murubeños de El Capea y Carmen Lorenzo. Actuaron, por este orden, los rejoneadores Leonardo Hernández (oreja y silencio); Lea Vicens (ovación y dos orejas); y Guillermo Hermoso de Mendoza (dos orejas y dos orejas y rabo). Como procede por la normativa sanitaria, la amazona francesa y el joven caballero navarro, aunque les correspondía, no salieron a hombros por la puerta grande de la ciudad andaluza

Guillermo se enfrentó en primer lugar al tercer toro de la mañana: Africano, marcado con el hierro de Carmen Lorenzo y el número 33 y con 504 kilos de peso. El navarro montó de salida a Alquimista, en el tercio de banderillas a Berlín e Índico y para el último tercio a Esencial.

Ante su segundo toro, último de la función, de nombre Recobero, del hierro de El Capea, número 1 y de 485 kilos, utilizó de salida Jíbaro; en banderillas a Disparate y Arsenio; y para el último tercio Esencial. Con este último mató a sus dos toros de sendos y eficaces rejones al primer intento, rubricando dos sobresalientes faenas premiadas con dos orejas y otras dos orejas y rabo. De este último corresponde la fotografía que ilustra esta noticia.

Guillermo Hermoso de Mendoza cerró 2020, cuya temporada, como todo, ha sido decepcionante y ruinosa, con una actuación memorable; quizá una de las mejores en sus ya 4 años como profesional. Campaña, que a pesar de este sonado triunfo, no ha cumplido ni de lejos las expectativas para Guillermo. Para la estadística se anotan cuatro festejos (Talayuela, Nîmes, Logroño y Jaén, sumando ocho orejas y un rabo). Y para la no estadística las previsiones de medio centenar de festejos y la confirmación y presentación en plazas como Madrid y Pamplona. Quizá, ojalá, pueda resarcirse en 2021. Las condiciones técnicas y artísticas y la fuerza de su juventud, auguran para Guillermo Hermoso de Mendoza un futuro a la altura de la maestría de su padre. Lo puesto en escena el domingo en Jaén fue una gran despedida y un hasta pronto con un salto de calidad, como dice su tío Juan Andrés, que disfrutaremos en cuanto se normalice la situación sanitaria mundial.