Bien sea en un concierto en directo, bien en la radio, en CD, en vídeo o como banda sonora, la música emociona, independientemente de la forma en la que esta se disfrute. Y emociona de tal manera que pone los pelos de punta, hace que las lágrimas broten o que nuestro cuerpo sienta una necesidad inevitable de bailar. Y esto lo consigue solo la música. Pero ¿qué pasa si a esta emoción se suma la tecnología? La experiencia resulta mágica. Este es el objetivo de Symphony. Un viaje al corazón de la música, una experiencia inmersiva que ya se puede disfrutar en el Paseo Sarasate y que permitirá a los espectadores situarse en el centro de una orquesta a través de la realidad virtual, además de disfrutar de un preámbulo sonoro y visual mediante una película panorámica protagonizada, también, por la música.

Symphony. Un viaje al corazón de la música es una nueva exposición itinerante de Fundación la Caixa con la que se pretende llegar a cerca de 100 lugares entre España y Portugal en los próximos 10 años, siendo Pamplona una de las primeras ciudades que acoge el proyecto. La muestra, comisariada por Marcel Gorgori i Argemí, está formada por dos grandes salas que ofrecen dos experiencias diferentes, siempre con la música como protagonista. La primera película, de 12 de minutos, es una grabación sin palabras en la que el sonido y la música conducen la historia. Tres jóvenes músicos de diferentes partes del mundo protagonizan esta proyección, rodada en Colombia, Nueva York y la costa mediterránea, a través del retrato de los sonidos y de las músicas propias de los lugares donde viven. "Esta pieza muestra que la música es una elaboración humana, al mismo tiempo que la música es un embrión que se encuentra en nuestro alrededor, seamos quienes seamos y vivamos donde vivamos", destaca el comisario de la muestra.

Unas gafas de realidad virtual permiten adentrarse en las entrañas de una orquesta.

Una vez vista esta primera pieza audiovisual, los espectadores pasan a otra sala en la que deben colocarse unas gafas de realidad virtual con las que se introducen en la Mahler Chamber Orchestra y se entremezclan entre los jóvenes artistas de la Fundación Gustavo Dudamell. La experiencia permite disfrutar de la Quinta Sinfonía de Beethoven, con el propio director de orquesta Gustavo Dudamell en primera fila, a la vez que permite observar de cerca el trabajo de un luthier. También se escuchará la Primera Sinfonía de Gustav Mahler mientras se disfruta de un entorno íntimo y especial, para finalizar el viaje con un fragmento de West Side Story, de Leonard Bernstein. El artífice de este trabajo, grabado en 2019, ha sido Igor Cortadellas.

Y todo esto, según Gorgori i Argemí, con la intención de "aumentar el interés hacia la música clásica de una manera nada clásica", así como hacer entender al espectador que "para que la música cumpla su objetivo es imprescindible la madera y el metal, pero también el alma de quien la interpreta". Las entradas para esta exposición, que permanecerá hasta el 5 de octubre, se pueden adquirir de forma gratuita en symphony.fundacionlacaixa.org o en la taquilla situada junto a la actividad.