omo todos los años cuando llega la temporada invernal los cazadores de jabalí en batida de las zonas más altas y montañosas de Navarra se encuentran con el mismo problema al cubrirse su territorio de nieve, impidiendo durante días y días la caza en batida de estos animales. Esto es un claro ejemplo de lo que hay que modificar en la actual Ley de Caza de Navarra, la cual está en trámite de modificación en el Parlamento foral.

Navarra es una comunidad con una gran biodiversidad donde podemos encontrar desde zonas desérticas con las Bardenas, zonas de cultivo y matorral en la zona media, y bosques de todo tipo y altitud, hasta zonas de alta montaña las cuales están cubiertas de nieve una buena parte del invierno, habitando en todos ellas amplias poblaciones de jabalíes, cada una de las cuales tienen una problemática que exige una gestión diferente que se adapte a los diferentes condicionantes.

En los lugares donde nieva de forma excepcional esto no es un problema, porque la nieve se va en muy pocos días y las jornadas de caza que no se permite la caza del jabalí son muy pocas al año. No pasa nada porque las cuadrillas de caza de esos lugares esos días se dediquen a cazar alguna zona más baja del coto donde haya menos nieve o preparen unos buenos almuerzos, pero la situación se agrava, por ejemplo en los valles pirenaicos de Roncal, Aezkoa y Salazar, o en zonas altas de otras zonas de Navarra como puede ser por ejemplo las zonas de entre el Adi y el puerto de Belate, Aralar, Urbasa, valle de Goñi, etc, cuando el invierno se recrudece desde el mes de diciembre hasta febrero cubriendo de nieve estas zonas, no pudiéndose realizar batidas durante largos periodos de tiempo, con los consiguientes perjuicios que ocasionan estos animales en la agricultura y en la circulación. La extracción del exceso de animales es muy importante para controlar el problema de la peste porcina africana y resto de enfermedades que pueden trasmitir a la ganadería.

Esta es una reivindicación que las sociedades de cazadores de las zonas más afectadas vienen denunciando desde hace varios año, ya que por término medio todos los años pierden por este problema entre un mes y mes y medio de caza, siendo una contradicción que por un lado la administración inste a los cazadores que reduzcan los máximo posible las poblaciones de jabalí por los problemas que ocasionan, autorizando su caza en agosto cuando no se puede cazar por el calor, y cuando es la época más propicia ya que las crías están más crecidas no les dejen cazar si hay unos dedos de nieve. Su opinión es que no se puede hacer una norma igual para toda Navarra, ya que las situaciones y problemáticas entre los diferentes territorios situaciones son diferentes.

Hace pocos meses, en la comparecencia que Adecana llevó a cabo en el Parlamento de Navarra con ocasión de los trabajos preparatorios para la modificación y actualización de la Ley de Caza de Navarra, esta Asociacion ha solicitado ante la Comisión parlamentaria que está estudiándola un cambio legislativo que adecue la normativa para solucionar este problema de forma que los cazadores navarros de las zonas que sufren este tipo de problemas puedan llevar a cabo las batidas de caza mayor con nieve hasta un determinado espesor. Es público y notorio que, hablando de caza mayor en montaña, una capa de nieve de pocos centímetros no afecta ni merma las posibilidades de defensa de esos animales, ya que habitan allí todo el año con nieve y están muy acostumbrados a ella, afectando incluso mucho más a los cazadores para resacar las zonas a batir, que a los propios animales.

Un claro ejemplo de lo que hay que modificar en la actual Ley de Caza es como como la caza con nieve ha sido regulada en otras comunidades autónomas del Pirineo, como es el caso de Aragón, en donde a una serie de municipios regulados en un anexo se permite realizar las batidas de caza mayor con un máximo de medio metro de espesor. Adecana lo que pretende es que la caza con nieve se trate como una medida para reducir población y daños de forma global, y no como una herramienta puntual y excepcional.

A la espera de que se modifique la Ley de Caza y se apruebe la nueva Ley de Caza que está en trámite parlamentario, la legislación actual es la siguiente:

Con carácter general, se prohíbe, salvo autorización excepcional, el cazar en días de nieve, cuando ésta cubra de forma continua el suelo o cuando por causa de la misma queden reducidas las posibilidades de defensa de las piezas de caza salvo en la modalidad caza de paloma y malviz desde puestos de tiro.

Como método de control únicamente para jabalíes en días de nieve, y por lo tanto con un carácter excepcional, desde el mes de septiembre de este año, se ha dictado una Orden Foral que regula los métodos de control de esta especie causante de perjuicios para la salud o seguridad de las personas, para la agricultura, silvicultura, ganadería o para la fauna silvestre, cuando se den las siguientes condiciones:

-Se autoriza mediante declaración responsable.

-Que el resaque a batir cuente con más de un 25% de superficie sin nieve.

-Que la media de la profundidad de las manchas de nieve en dicho resaque sea de 15 cm, no existiendo en el mismo ninguna zona en la que dicha profundidad sea mayor de 30 cm.

-Y que no se prevean nevadas en las próximas 24 horas a contar desde el inicio de la batida, de acuerdo a las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología.