- Alimentando al Mundo, el documental de National Geographic dirigido por Ron Howard sobre el conocido chef Jose Andrés y su organización sin ánimo de lucro World Central Kitchen, se estrenará mañana viernes en Disney+. El documental se centra en el chef y en su ONG, cuya historia acumula ya 12 años, desde que era apenas un grupo de voluntarios hasta convertirse en una de las organizaciones de ayuda humanitaria mejor reconocidas en el sector de la asistencia durante los desastres naturales o durante un conflicto armado como el de Ucrania. Debido al aumento sin precedentes de dichos desastres, catalizados por el cambio climático, esta historia es más relevante que nunca. "World Central Kitchen todavía tiene la mentalidad de una startup, señala el chef, preocupado porque el número de pobres y hambrientos siga creciendo.

Este filme es la segunda colaboración de National Geographic con el director Ron Howard, ya que este año presentaron en el Festival de Sundance el documental Reconstruyendo Paradise sobre los desoladores incendios de 2018 en el norte de California. "Cuando empezamos a rodar Reconstruyendo Paradise me quedé fascinado al ver el impacto inmediato que José y el equipo de World Central Kitchen tuvieron en los ciudadanos de Paradise justo después del devastador incendio que destruyó su población", señala Howard.

Howard (Apolo 13, El código Da Vinci, Oscar a la mejor película y al mejor director por Una mente maravillosa), explicaba que se había dado cuenta de que "se puede hacer una película sobre superhéroes sin efectos especiales, incluso sin un traje y una capa, pero tienes que encontrar al protagonista adecuado". Y lo encontró en José Andrés. "Es un líder que ha demostrado que los individuos pueden marcar la diferencia. Lo que ha conseguido desde que se presentó en Haití con buenas intenciones y una tarjeta de crédito hasta convertir World Central Kitchen en una organización que presta una ayuda increíble en zonas de desastre, está basado en un principio fundamental. El de que hay dignidad en asegurarse de que la gente puede alimentarse".

"Y ahora, siguiéndole mientras ayuda a aquellos que más lo necesitan durante esta pandemia, me he dado cuenta de que el trabajo que está haciendo en todo el mundo es una de las necesidades más críticas, y a menudo pasadas por alto, en la asistencia en un desastre. Estoy honrado de compartir su misión con el público en todo el mundo", agrega.

Alimentando al mundo cuenta como el comienzo de la historia de World Central Kitchen fue el terremoto de Haití en el año 2010. Después, la organización ha intervenido en casi todas las partes del mundo tras todo tipo de fenómenos naturales, como en Puerto Rico, Estados Unidos, Brasil, La Palma con motivo de la erupción del volcán Cumbre Vieja, diversas crisis de refugiados, la pandemia de la covid-19 o, más recientemente y en la actualidad, con motivo de la invasión de Ucrania. World Central Kitchen acudió a la frontera entre Ucrania y Polonia y, a las pocas horas de desatarse la ocupación, ya estaban repartiendo alimentos a todos los ciudadanos ucranianos que la cruzaban. Con el desarrollo del conflicto, esa ayuda se ha extendido progresivamente a otros ocho pasos fronterizos distintos además de que, sobre el terreno, colabora con restaurantes locales para ofrecer comidas.

José Andrés explica que lo que le llevó a crear su organización "fue comprobar la inacción que se producía, como cuando veías a miles de estadounidenses en un estadio tras el paso del huracán Katrina y nadie les atendía, les daba de comer o beber. Me cansé de ver esto desde mi casa". Y así se puede comprobar en el documental, que muestra en detalle a Andrés y su gente interviniendo sobre el terreno, y a pesar de ello llorando por pensar que lo que hacía no era suficiente. "Espero que podamos alimentar a la gente, pero también que no nos pase nada" se le escucha decir en un momento de la cinta.

"Nadie discrepará en que la comida y el agua son las dos cosas más importantes en la vida y más en situación de emergencia", señala el cocinero, quien asegura que "servir a la gente un plato de comida después de un desastre es más que darles calorías para llenarles. Una comida caliente es tranquilidad, dignidad, esperanza, una señal de que alguien se preocupa y de que mañana será mejor". l