La curiosidad y la forma divergente de mirar la realidad de Leonardo da Vinci se ponen en valor en una nueva exposición itinerante de Fundación la Caixa que recala ahora en Pamplona.

Una muestra experiencial instalada hasta el 17 de enero en una carpa en el paseo de Sarasate y que, bajo el título Leonardo da Vinci: Observa, Cuestiona, Experimenta, invita a agudizar el ojo y la mente a través de juegos interactivos, un espectáculo audiovisual, una app de realidad aumentada y maquetas a gran escala de algunos de los diseños de Da Vinci.

Pintor, escultor, dibujante, ingeniero, arquitecto, urbanista, naturalista, anatomista, músico, filósofo e inventor, este “auténtico hombre del Renacimiento” estudió “todo lo posible en aquel momento tan propicio para la interconexión de conceptos y disciplinas, en que el arte comenzó a estar mejor valorado y estaba muy unido a la ciencia”, ha destacado este martes la asesora de la exposición, Érika Goyarrola, en la presentación que ha tenido lugar por la mañana y en la que han intervenido también la alcaldesa de Pamplona, Cristina Ibarrola; la delegada de Fundación la Caixa en Navarra, Izaskun Azcona; y el director de Instituciones de CaixaBank de la Dirección Territorial Ebro, Miguel Navarrete.

Juegos interactivos

En palabras de Goyarrola, “Leonardo da Vinci miraba todo con un gran detenimiento y buscaba analogías en la naturaleza para crear sus inventos”, y a eso es a lo que invita esta muestra, de acceso libre y dirigida a públicos de todas las edades. “Quien se acerque y participe saldrá de aquí cuestionándose su día a día”, y experimentará, como lo hacía este genio curioso y obsesionado con poder volar, lo importante que es el trabajo en equipo.

El proyecto divulgativo Leonardo da Vinci: Observa. Cuestiona. Experimenta se inició para conmemorar el quinto centenario de la muerte de Da Vinci (1452-1519) y cuenta con el asesoramiento científico del historiador Pascal Brioist y la colaboración con el espacio de difusión del legado del inventor que se encuentra en el castillo de Clos Lucé (Amboise, Francia), donde residió durante unos años el genial artista e inventor. Un auténtico polímata cuyas ideas siguen siendo, quinientos años después, modernas y premonitorias.

“Quien se acerque y participe saldrá de esta exposición cuestionándose su día a día”

Érika Goyarrola - Asesora de la exposición 'Leonardo da Vinci: Observa, Cuestiona, Experimenta'

En el interior de la muestra, los visitantes podrán profundizar en el pensamiento de Da Vinci a través de una gran proyección audiovisual que presenta un día cualquiera de la vida cotidiana moderna inspirándose en la mirada de Leonardo.

Además, se ofrece la oportunidad de experimentar, personalmente o en grupo, con siete juegos interactivos –analógicos y digitales– que invitan a conectar elementos aparentemente no relacionados, a descubrir detalles en retratos femeninos realizados por Leonardo, a ahondar en los conceptos de luz y sombra, a pensar con las manos, a poner en práctica la capacidad de descomponer objetos complejos en distintos elementos con una función concreta dentro del conjunto, a probar mecanismos ideados por Da Vinci o a experimentar la observación con lecciones de su Tratado de pintura.

Las maquetas

En el exterior, siguiendo con la filosofía de las exposiciones itinerantes de La Caixa que buscan sacar el arte a la calle, se exhiben cuatro maquetas a gran escala que interpretan con fidelidad y precisión los bocetos originales de Leonardo da Vinci de cuatro inventos que ideó, construidos aquí con materiales contemporáneos y tecnología moderna gracias a especialistas en ingeniería en los campos de la construcción de robots y prototipos.

Se trata de Tornillo aéreo, la exploración teórica de esa forma mecánica para vencer la densidad del aire que podría representar el primer prototipo del futuro helicóptero; Máquina voladora, inspirada en el vuelo de la libélula; Barco de palas, el ingenio que diseñó para reducir la cantidad de remos necesarios para mover un barco, antecedente de los barcos de palas del Misisipi; y también se reproduce a escala el Hombre de Vitruvio, inspirada en la obra del arquitecto romano del mismo nombre, quien sostenía que los templos, para ser perfectos, debían ser análogos a la anatomía humana.

EN CORTO

  • Horarios de la muestra. En castellano, de lunes a viernes a las 12.45, 17, 17.45, 18.30 y 20.15 horas; y sábados, domingos y festivos a las 11, 11.45, 12.30, 17, 17.45, 18.30 y 20.15 horas. En euskera, de lunes a domingo y festivos, a las 13.30 y 19.15 horas. Se ofrecen visitas comentadas para público general, grupos de escolares y otros colectivos. La exposición no abrirá los días 25 de diciembre y 1 de enero, ni las tardes de los días 24 y 31 de diciembre.
  • App para interpretar las maquetas. Para visualizar las maquetas que se muestran de Leonardo Da Vinci en su aspecto original, con los materiales de la época (hierro, madera, cuerda, cuero, lino) y los movimientos tal y como el inventor los imaginó, la muestra ha previsto una app gratuita, Leonardo CaixaForum, descargable en Apple Store y Google Play Store. Por medio del dispositivo móvil personal, en realidad aumentada mediante el escaneo de los códigos QR que hay en la muestra, se podrá ver qué aspecto hubieran tenido las maquetas.
  • Un susto en la rueda de prensa. En la presentación pública de la exposición, este martes por la mañana en la carpa instalada en el paseo de Sarasate, el director general de Cultura del Ayuntamiento de Pamplona, Rudy Goroskieta, sufrió un desmayo y tuvo que ser atendido por una UVI móvil que se desplazó hasta el lugar. Previamente le asistió la alcaldesa Cristina Ibarrola, médico, que se encontraba en la exposición. Todo quedó en un susto y Goroskieta salió de la ambulancia en buen estado.