José Ramón Anda propone "una caricia para los sentidos" en la Capilla del Museo de Navarra
El artista de Bakaiku presenta una veintena de obras en 'Sombras de luz / Argi itzalak', exposición abierta hasta marzo de 2025
José Ramón Anda(Bakaiku, 1949) ha transformado la Capilla del Museo de Navarra en un espacio de "quietud, calma, paz, elevación, refinamiento..." Así lo percibe Mercedes Jover, directora de la pinacoteca, donde se podrá ver, hasta marzo de 2025, la exposición Sombras de luz / Argi itzalak, con una veintena de obras del creador navarro.
Inaugurada este viernes, 17 de mayo, como parte de las actividades del Día Internacional de los Museos, la muestra contiene vídeo por primera vez en la trayectoria de Anda. Se trata de “un poema visual” realizado porToni Sasal con música de Carlos Núñez Medina que refleja las luces y sombras que se filtran en el taller del artista. Se trata de una propuesta que se enmarca dentro del programa de muestras temporales de larga duración (Todo el arte es contemporáneo) que el Museo de Navarra acoge en su Capilla y por el que ya han pasado artistas como Dora Salazar, Carlos Irijalba, Celia Eslava, Gentz del Valle, Javier Muro y María Jiménez Moreno.
Jover, que ha presidido la presentación de la exposición junto al propio artista y al director general de Cultura del Gobierno foral, Ignacio Apezteguía, afirma que este ciclo pretende "dotar de dinamismo al Museo", con exhibiciones que parte de obras de autores presentes en su colección y otras que crea o resignifica el creador, al que "se le da la libertad de tomar la sala".
"Excepcionalmente hermosa"
Eso sí, la directora confiesa que Anda "nos ha frenado ese dinamismo", pero para bien. Porque, al contemplar su muestra, "me vienen palabras como quietud, calma, paz, refinamiento, estatismo, a pesar de que incluye vídeo por primera vez, y silencio, aunque la música invade suavemente el espacio". En ese sentido, Sombras de luz / Argi itzalak es "una caricia para los sentidos y para los sentimientos", con obras "magníficas" que en la Capilla se revelan "excepcionalmente hermosas" creadas en madera, bronce, mármol y alabastro. Entre ellas, el boceto de 'El ojo de Polifemo', escultura que puede verse en el parque de Antoniutti de Pamplona.
La museografía ha corrido a cargo de Ana García y Álvaro Machimbarrena, resonsable también del texto de la publicación editada con motivo de esta exposición y que verá la luz próximamente. A lo largo del año, se celebrarán distintas actividades, con visitas acompañadas entre ellas, pero, antes, el domingo 26 de mayo (12.30 horas) José Ramón Anda conducirá en persona un recorrido por sus obras, algunas de las cuales han sido realizadas expresamente para este proyecto y otras proceden de distintas épocas, desde 1980 hasta la actualidad. La más antigua de ellas es ¡Oh, Italia!, perteneciente a la colección del Museo de Navarra, que posee cuatro esculturas de este artista.
Espacio mágico
Hombre de pocas palabras, Anda admite que, en un primer momento, la ubicación de la muestra le pareció “difícil”, pero, en una segunda visita y con más calma, “experimenté el silencio, la luz y la magia del espacio”. La geometría y el concepto de tiempo, tan “inherente a los materiales”, dialogan entre las piezas, dispuestas de modo que generan una atmósfera de “calma y reflexión”. Y es que, el artista de Sakana cita a Paul Auster para defender “la lentitud” y el volver una y otra vez sobre lo mismo. “En eso consiste la parte dura del trabajo: en hacer que parezca fácil”, declaró el autor de la Trilogía de Nueva York y comparte el escultor navarro.
Algunas de las piezas que se exhiben en el Museo fueron creadas a principios de los 2000, “pero se quedaron aparcadas en el taller” y “han aguantado” el paso de los años, a la espera del momento y el lugar “idóneos”.
Trayectoria
José Ramón Anda Goikoetxea realizó estudios en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando de Madrid entre 1970 y 1974, siendo becado ese mismo año por la Academia Española de Bellas Artes de Roma, donde estuvo hasta la primavera de 1975. A lo largo de su carrera como escultor ha recibido cerca de una decena de premios y cuenta, además, con una docena de esculturas urbanas en la CAV y Navarra.
El nombre de la muestra, Sombras de Luz/Argi itzalak proviene directamente de las sensaciones que el espacio de la Capilla del Museo de Navarra provoca en el artista. “Intervenir en este espacio me evoca de inmediato el ambiente que se respira en un templo: silencio, luces y sombras”, dice José Ramón Anda. Para Anda, la capilla del Museo “tiene dos lecturas diferentes. Por un lado, tenemos el espacio, una planta en cruz latina de considerable altura, que invita, como ocurre en los templos, a la calma y el silencio. Por otro lado, al quedar en el lugar los retablos, tanto del altar mayor como de las capillas laterales, que me parece pueden ‘distraer’, me veo impulsado a intervenir en la sala con el objeto de que continúe siendo un lugar que ofrece condiciones para descubrir la poética del espacio”.
Así, José Ramón Anda presenta materiales como madera, mármol, bronce y alabastro en esculturas que adoptan la verticalidad como muchas de las imágenes y grandes candelabros que hay en un templo. Se incluyen también otros elementos horizontales como mesa, banco o relieves, dándoles interpretación y sentido nuevos, en un ambiente oscuro o con la luz atenuada.