Este verano, la comarca navarra de Malerreka –con epicentro en Ituren y Elgorriaga– acogerá la segunda edición de Truxa Muxa, una incubadora creativa única en España que reúne a profesionales de la animación, el videojuego y las artes digitales para crear, conectar y transformar desde lo rural.

Tras una primera edición piloto “con excelentes resultados” –celebran desde la organización–, Truxa Muxa regresa con una programación “más sólida y ambiciosa, evolucionando del concepto de residencia a una incubadora creativa”, informan los impulsores de la iniciativa, cuya segunda edición se presentó ayer por la mañana en el Palacio del Condestable.

En esta ocasión, el evento contará con figuras destacadas del sector, entre ellas Laura Gonçalves, Almudena Redondo o Jose Luis Farias, e integrará formación, prototipado, exploración artística y visibilidad para nuevos talentos, en especial para mujeres creadoras.

Truxa Muxa arranca este mes de junio con un bloque de formación y masterclasses online. Esta experiencia híbrida culminará en una residencia inmersiva en septiembre (del 18 al 21), donde los participantes convivirán y crearán en el entorno natural de Malerreka, conectando cultura, tradición y bienestar.

Truxa Muxa “se consolida” en esta segunda edición como una incubadora creativa, “un espacio para repensar la creación digital desde lo rural, fomentar redes profesionales y abordar retos como la despoblación o el cambio climático desde el pensamiento artístico y el diseño de futuros posibles”, destacan desde la organización del evento.

Para esta nueva edición se han seleccionado una combinación de proyectos de animación experimental y diseño de videojuegos con enfoque ecológico. Se trata de cinco propuestas: Katú y el bosque, de Samsa Studio; Rollin’ Punkies, creado por Silvia Molina, Alberto Andrés y Juan Cermeño; Guayota, creado por Patri Díaz y Marian Zomeño; Martina e Guará, de Paula de Abreu; y The Adventure of Rupee, de Marina Gil Torres.

“Truxa Muxa es un espacio para la creación, el aprendizaje y la conexión con la naturaleza. Ponemos en contacto a personas creativas con valores similares y les facilitamos herramientas para crear desde el respeto hacia otros seres vivos y el territorio”, señala Bárbara Gragirena, directora del proyecto.

Una apuesta estratégica

El evento no solo sitúa a Navarra en el mapa del desarrollo digital iberoamericano, sino que también promueve el euskera, la educación ambiental, el turismo sostenible y el bienestar rural.

Con un enfoque colaborativo, Truxa Muxa trabaja junto con agentes locales, productores audiovisuales y comunidades artísticas para activar nuevas sinergias.

Truxa Muxa cuenta con la financiación del Gobierno de Navarra y el apoyo de Elkar, Reyno Gourmet, así como del guarderío de Medio Ambiente (Basozainak). Se puede encontrar más información sobre esta nueva edición y realizar reservas en www.truxamuxa.es.