Madrid - La selección española juega -con los navarros Iosu Goñi y Niko Mindegia en sus filas- la Copa Suiza. Las semifinales de mañana serán Suiza-España (18.25, Teledeporte) y Croacia-Suecia. El domingo se jugará a las 12.00 por el tercer y cuarto puesto, y a las 16.00 la final.

Iosu Goñi, que está cuajando una gran temporada en el Pays d'Aix francés, afronta su debut internacional como un "examen" para ganarse un puesto en un selección que el técnico Manolo Cadenas quiere rejuvenecer, para lo cual ha convocado a varios jugadores nacidos en los años 1990 (caso de Goñi) y 1991.

En los últimos meses no deja de sonar el nombre de Iosu Goñi en casi cada conversación sobre el futuro de la selección. ¿Es consciente de las expectativas que genera?

-No quiero pensar mucho si se habla o no de mí, lo que tengo que hacer es trabajar duro cada día, intentar mejorar, y en ese sentido la experiencia en Francia está siendo buenísima, porque tengo la oportunidad de aprender de uno de los mejores entrenadores del mundo como es Noka Serdarusic y porque estoy jugando muchos minutos y teniendo importancia en el juego del equipo.

Tantos halagos suponen una mayor responsabilidad.

-Está claro que siempre existe un poco de presión, pero un jugador lo que quiere es tener esa responsabilidad. Eso es bueno, quiere decir que estás trabajando bien, que tienes que dar el callo. Es una presión buena.

¿Le ha pedido Manolo Cadenas algo concreto para estos amistosos?

-Todavía no hemos hablado de qué espera de mí. Es mi primera convocatoria e intentaré aportar todo lo que pueda tanto en ataque como en defensa.

Y usted, ¿qué cree que puede aportar a la selección?

-Siempre me ha gustado coger responsabilidad y empezar a ganar minutos desde la defensa, porque si no defiendes, evidentemente, es más complicado ganarse minutos en ataque.

¿Qué ha añadido a su juego su llegada a Francia?

-La Liga francesa es un poquito menos táctica que la española, el juego es un poco más individual y más físico, y creo que me ha venido bien tener que exigirme más en el trabajo físico. Además los ataques son menos largos, hay mucho juego de contraataque, mucho uno contra uno, lo que te exige tanto decisión, a la hora de atacar, como responsabilidad para bajar rápidamente a defender para evitar los contragolpes, porque en Francia cada pérdida de balón te cuesta la vida.

En esta convocatoria coincide con muchos jugadores -Gonzalo Pérez de Vargas, Rodrigo Corrales, Carlos Molina y Víctor Alonso- con los que ya jugó en la selección júnior. ¿Qué destacaría de esta nueva generación que poco a poco se va haciendo hueco en la absoluta?

-Hemos sido una generación en la que la gente siempre ha puesto muchas esperanzas, aunque no tuvimos suerte ni en Europeos ni en Mundiales. Nunca conseguimos una medalla y eso es una espinita clavada que quizá nos ha hecho ser un poquito más ambiciosos e intentar subir al máximo nivel.

Últimamente se ha abierto un debate sobre quién debe ocupar el lateral izquierdo de la selección. ¿Afronta esta convocatoria como un examen para ganarse ese puesto?

-Evidentemente sí que es un examen, pero no quiero tomármelo como algo malo, como una presión añadida. En la Copa Suiza tengo que salir a la pista a por todas y eso es lo que intentaré.

¿Se ve formando parte de la selección española en el Mundial de Qatar 2015?

-La verdad es que no lo sé. No quiero pensar en ello, prefiero no crearme expectativas a largo plazo, quiero pensar en esta convocatoria, en hacerlo lo mejor posible y lo que tenga que venir, vendrá.