pamplona - Axier Arteaga (Lasarte, 1996) no empezó con muy bien pie en el campo profesional. El partido le pasó por encima. Víctor Esteban y Ander Imaz dominaron completamente al delantero guipuzcoano y a Ibai Zabala. 22-6. La dureza del profesionalismo. Ahora, este exportero de las categorías inferiores de la Real Sociedad e hijo de pelotari profesional quiere tomarse las cosas con calma e ir mejorando para ir hacia arriba poco a poco.

No fue el debut soñado.

-Así es. Por lo menos la gente respondió acudiendo al frontón, fue muchísima e incluso hubo personas que se quedaron fuera. La pena fue que yo no di lo mío, no pude hacer gran cosa y en las oportunidades que tuve no estuve fino.

Se queda entonces con el ambiente vivido en el frontón.

-La gente claro que respondió. Hubo un ambiente extraordinario y muchas personas me escribieron diciéndome que no pudieron entrar porque no quedaban entradas. Fue una pena que no estar a mi nivel.

¿Le pudieron los nervios?

-Me sentí incómodo desde el primer momento. La verdad es que en el calentamiento me encontraba bien, pero no me esperaba el partido así. Era un encuentro montado para que Ibai Zabala dominara en la zaga y no ocurrió eso. Tuve que andar en defensa y no estuve fino.

¿Notó las exigencias de un partido profesional?

-Sí que se nota el cambio, sobre todo en las pelotas, que son mucho más vivas. Luego, los contrarios también. Víctor le da una gran velocidad al juego y se nota la diferencia.

El debut fue complicado, ¿pero y los momentos previos?

-Son días muy bonitos. La gente te para en la calle para felicitarte y además en mi caso ya estaba en la final del DV, se juntaron las dos cosas. Aunque no se va a repetir esto, estoy muy contento de haberlo vivido.

¿Cómo empezó a jugar a pelota?

-Empecé a los cuatro o cinco años. Mi padre había dejado el profesionalismo pero seguía entrenando y yo iba con él al frontón a andar con la goxua atrás. Varios padres iban a ver y sus hijos solían andar conmigo. Éramos de la misma edad, de la cuadrilla, y nos lo pasábamos muy bien. Así comenzó la afición.

¿Ayuda contar con un padre que haya sido profesional?

-Siempre me decía que había que seguir trabajando. Me ha apoyado muchísimo y la verdad es que sí que ayuda.

¿Su aita le presionó para que jugara a la pelota?

-Mi aita siempre me ha dicho que tenía que elegir yo. Antes estuve jugando al fútbol y me dio la libertad de hacer lo que yo quisiera. Él siempre me ha ayudado muchísimo; en el tema de manos, entrenamientos? estoy muy agradecido, pero la decisión de jugar a la pelota la tomé yo.

El fútbol no se le daba mal.

-Sí, anduve un año en la Real y luego seguí en el Ostadar, en el pueblo. Hasta los 15 años estuve compaginando el fútbol y la pelota, pero me iba bien, siempre estaba ocupado. Al final, jugaba a fútbol para entrenar el físico para la pelota. Además, me lo pasaba bien con los amigos y estoy muy contento de haber vivido esos momentos en el fútbol.

Así que tuvo claro que su futuro estaba en la pelota.

-Siempre, desde pequeño supe que el fútbol iba a acabar porque le daba todas las prioridades a la pelota y sabía que eso era lo mío.

Con su debut se une a una buena remesa de pelotaris guipuzcoanos que están llegando. ¿A qué cree que se debe esta explosión?

-No sé, creo que suele ir a rachas. Ha salido una generación muy buena con la del 96, que estamos Altuna, Irribarria y yo, luego también están Artola, Rezusta, Jaka, Tolosa? que son algo mayores. Estamos muchos guipuzcoanos, pero es una racha, los jóvenes navarros también vienen muy fuertes.

¿Cuántas veces se ha enfrentado con ellos?

-Contra Irribarria, Jokin, y Elordi, que está también para debutar, he jugado muchísimas veces. Los primeros han dado el salto desde el principio y enseguida fueron para arriba, ahora los dos están jugando el Parejas de Primera. Hasta ahí hay un salto, pero seguiremos trabajando y si un día estamos jugando contra ellos, estaremos muy contentos.

¿Le da esperanzas verles a ese nivel?

-Saber que has estado jugando contra ellos y verles ahí es una motivación extra.

¿Cuales son sus próximos objetivos de cara a los próximos meses?

-Todavía es muy temprano para marcarme objetivos, ya se vio el otro día que todavía me queda mucho por aprender. Ese es el objetivo, aprender e ir poco a poco hacia arriba.