- Osasuna Magna vivió ayer una jornada aberrante por la tardanza de la Federación Española (RFEF) en aplazar -por el caso de coronavirus en sus filas- el derbi navarro que le debía enfrentar a las 20.00 horas en Tudela con el Aspil-Jumpers Ribera Navarra.

Ésta es la cronología de los hechos:

- El domingo, como es preceptivo en la víspera de un partido, la plantilla de Osasuna Magna se sometió a unos tests de antígenos.

- Al dar positivo uno de sus jugadores, se sometió en la Clínica Universitaria -al jugador y a los otros dos compañeros de equipo con los que convive- a pruebas PCR. El jugador dio positivo. Sus compañeros dieron negativo, pero al ser convivientes se decretó su confinamiento.

- El club se puso en contacto con la Federación Española (RFEF) el mismo domingo por la noche para pedir la suspensión del partido, aportando como pruebas los certificados del positivo del jugador y los documentos que atestiguan que los otros dos futbolistas conviven con él.

- La RFEF no tomó ninguna decisión el domingo.

- La RFEF notificó ayer, a las 14.15 horas, que Osasuna Magna debía jugar el partido.

- La plantilla del club inició a las 17.00 horas su desplazamiento. Como de costumbre, el autobús partió de Irurtzun, recogió en el Navarra Arena a los jugadores que viven en Pamplona y su Comarca e inició el viaje a Tudela.

- En torno a las 17.35 horas, menos de dos horas y media antes del partido, cuando el autobús acababa de salir de Pamplona y aún no había llegado a la zona de servicio de Imarcoain, la RFEF se puso en contacto con el club para anunciarle que se suspendía el encuentro.

Los responsables de Osasuna Magna se mostraron ayer satisfechos con la decisión final de la RFEF de suspender el derbi, y solo lamentaron los cambios de opinión y, sobre todo, su tardanza en tomar la decisión definitiva.

Tatono Arregui, presidente del club, comentaba a este periódico: "El tema era meridiano. Si tenemos tres jugadores que viven juntos y uno da positivo y a los otros dos hay que confinarlos, el sentido común dice que hay que suspender el partido. Un ejemplo: el Barcelona tuvo el caso de un jugador que estuvo en contacto con un positivo y, aunque toda su estructura deportiva estaba limpia, le aplazaron el partido. Si en ese caso se hizo, es de sentido común que en el nuestro también había que hacerlo".

A la pregunta de si tan tardía decisión -ya con el equipo en el autobús- ha sido por negligencia o mala fe de la RFEF (con la que el Club Xota mantiene una larga polémica), Tatono Arregui respondía: "Lo que vemos es que las cosas deberían funcionar mucho mejor, y que podían habernos ahorrado todo el sinvivir desde el domingo, que si se juega o no se juega".

Por su parte, Carmelo Villamarín, gerente del club, explicaba: "La decisión de aplazar el partido es correcta. No tenía sentido que se jugara, cuando todos los partidos precedentes con casos similares, o incluso sin positivos directos, se han aplazado. Creo que la RFEF ha cambiado de opinión de las 2 a las 5 de la tarde tras el revuelo que ha habido en las redes sociales por el posible agravio comparativo. En todo caso, es una decisión lógica, y no solo por nuestro equipo sino también por la seguridad de los jugadores rivales".

"¿Negligencia o mala fe de la RFEF? Lo que vemos es que las cosas deberían funcionar mucho mejor"

Presidente del Xota Osasuna Magna

"Creo que la RFEF ha cambiado de opinión tras el revuelo por el posible agravio comparativo"

Gerente del Xota Osasuna Magna