Le costó a Xota Navarra Osasuna Magna imponerse al penúltimo clasificado de la tabla, un Fútbol Emotion Zaragoza que plantó cara hasta el minuto 34, cuando los navarros conseguían poner dos goles de ventaja de por medio (3-5) y obligaban al rival a abrir líneas y apostar por el portero jugador en busca de la remontada. A partir de ahí, los visitantes aprovecharon los espacios que dejaba el rival para sentenciar el encuentro.

Salía muy fuerte el equipo zaragozano, buscando la puerta contraria y tratando de mover rápido el balón, y tras una ocasión de Richi que abortaba con éxito Asier, Emotion Zaragoza se adelantaba a los dos minutos en un penalti que transformaba Dani Santos.

Reaccionaban pronto los de Imanol Arregui y Bynho empataba un minuto mas tarde. Aunque tampoco los locales miraban para otro lado. El partido estaba abierto y las ocasiones se sucedían en ambas porterías. Una dinámica que no gustaba al técnico de Osasuna Magna, que paraba el partido en el minuto 16. Quería mas control de los suyos, que tras el parón recuperaban el balón.

La segunda mitad comenzaba como la primera, los locales volcados al ataque y un rápido gol en contra para los de Imanol Arregui. Aunque una vez mas la respuesta llegaba acto seguido y Linhares volvía a igualar el partido (2-2). Se vivían de nuevo minutos de igualdad, aunque esta vez los navarros conseguían imponer su pegada y se adelantaban en el 27, en un buen remate de Raúl Rocha.

Apretaban los locales en busca de la remontada y aprovechaba el contragolpe para colocar el 2-4 en el marcador en el minuto 33. Pero Richi acortaba pronto distancias y daba vida a los aragoneses, que seguían poniendo en apuros a la defensa visitante.

Había que mantener la calma y evitar que el partido se volviese loco. Lo conseguía Osasuna Magna gracias al gol de Rocha en el 35 (3-5). A Zaragoza se le acababa el tiempo y en el minuto 37 el técnico local apostaba el portero-jugador.

Supo manejar bien la situación el Magna, replegándose bien y aprovechando los espacios para tratar de matar el partido al contragolpe.

Tuvieron ocasiones los locales para recortar diferencias, pero Richi y Ortego fallaron las mas claras y Magna se crecía a medida que pasaban los minutos y aumentaba la desesperación del Zaragoza. Defendía con todo el equipo navarro que, además, supo aprovechar bien la situación para matar el encuentro en los últimos compases con dos nuevos goles para colocar el 3-7 definitivo.