- Se avecinan días especiales para Anaitasuna. Intensos. Ilusionantes. El club pamplonés, que encadena éxito tras éxito esta temporada en gran parte de sus categorías, se prepara para un fin de semana donde quiere recoger los frutos de una temporada cargada de sacrificio, de entrega y de esfuerzo. Este domingo, si todo va bien, Anaitasuna puede tener dos equipos en la División de Honor Plata en masculino y femenino, el segundo escalón del balonmano estatal, y por ello va a pelear y a dejarse la piel.

Los Primera Nacional de la entidad pamplonesa ya están preparados y listos para batallar por sus fases de ascenso. Para los chicos, con más recorrido sobre sus espaldas, será su quinta fase en los últimos seis años. La cuarta consecutiva. Para las chicas, que echaron a andar hace dos temporadas -y una se truncó por la pandemia- será su primera oportunidad de mirar a lo alto. De subir de categoría.

Ellas tendrán la suerte de jugar en casa. De ser anfitrionas. Disfrutarán de una Catedral a su favor y ese es un factor que no piensan desaprovechar. En esta fase de ascenso, un total de 24 equipos, repartidos en seis grupos, optarán por amarrar una de las seis plazas en juego para ascender a la División de Honor Plata femenina -más otras dos a designar- y las jugadoras de Chema Vives pugnarán al máximo por ser una de las afortunadas. En su grupo, el B, se verán las caras con el AD La Jota de Zaragoza, el Liberbank Pereda de Cantabria y el Urbil-Usurbil KE de Gipuzkoa. "Es el grupo más duro de todos, el de mayor nivel, donde nos juntamos todos equipos campeones de Liga", explica el técnico del Helvetia Anaitasuna femenino. El primer partido, previsto para mañana contra Pereda, lo jugarán "contra el rival y contra los nervios", pero las jugadoras se sienten preparadas para afrontarlo.

"Llega el momento de disfrutar. De estar donde queríamos estar y como queríamos estar. Eso no quiere decir que caigamos en la confianza. Pero hemos hecho las cosas bien desde agosto, cuando empezamos a entrenar, y este es el premio", constata un Chema Vives que ya está curtido en batallas, en competiciones nacionales e internacionales, pero que afronta esta nueva pelea con la misma ilusión.

Cada uno de los rivales, analiza, tiene "sus características". El Liberbank Pereda es un equipo "muy joven, pero con muchas ganas. Aporta velocidad y dinamismo, y viene sin presión, puesto que su primer equipo ha descendido a Plata y eso les resta parte de sus opciones". El AD La Jota de Zaragoza es un conjunto "que juega mucho a la contra y trabaja las presiones defensivas"; mientras que el Urbil-Usurbil KE "tiene un gran lanzamiento exterior y jugadoras veteranas". Con todo, el Helvetia Anaitasuna desplegará sus armas y tratará de disfrutar de un final de temporada con el "éxito" añadido de proclamarse "campeón de Liga y de Copa". "Y, encima, plantándonos en una fase de ascenso", constata Chema Vives.

Asimismo, este fin de semana también será especial para el Helvetia Anaitasuna masculino. Su objetivo, el mismo que sus compañeras: ascender a la División de Honor Plata. Este será su cuarto intento consecutivo y el quinto en los últimos seis años. En 2015, lo intentaron en Ciudad Real, donde este año repetirán experiencia; en 2017 lucharon en Alicante, en 2018 en Algemesí y en 2019 en Vigo. Carlos García, su técnico y coordinador de una exitosa cantera en Anaitasuna, valora el esfuerzo de haberse plantado durante tantos años en una fase de ascenso. Algo nada fácil, ya que la exigencia se incrementa campaña tras campaña. Esta vez, explica que viajarán a Ciudad Real "más armados" si cabe. "A la fase que mejor fuimos fue a la de Alicante y creo que esta es la segunda en ese sentido. Tanto a Vigo como a Algemesí fuimos entre alfileres", recuerda.

El Helvetia Anaitasuna masculino ha culminado una exitosa temporada regular en segunda posición, después de coquetear durante buena parte de las jornadas con el liderato. Sin embargo, como dice el técnico asturiano, "en este tramo final hemos perdido tres de los últimos cinco partidos y eso no es normal". Un contratiempo en el que mucho han tenido que ver las lesiones de jugadores como Íñigo Donézar o Ricardo Albizu.

Carlos García augura una fase "dura". Entre sus rivales, su club de toda la vida, el Unión Financiera "Estuve allí ocho años. Han hecho una Liga de menos a más", explica. En la lucha, en un escenario impecable como el Quijote Arena, estará también el Caserío de Ciudad Real. "Un conjunto potente, campeón de su grupo, que juega en casa". Y también el Esplugues catalán. "El que, quizás, más nivel medio puede tener". Este último será el primer rival mañana para los navarros y, como buen partido inicial, será "clave" en el devenir de la fase de ascenso, donde hay tres plazas en liza.

"Nosotros jugaremos nuestras armas. Vamos a ir a por todas, a pelearlo. Estamos muy motivados para ganar esta fase y es lo que intentaremos hacer", advierte Carlos García.

Ocurra lo que ocurra, se gane o se pierda, se alcance el objetivo del ascenso a Plata o no, lo cierto es que Anaitasuna volverá a evidenciar el buen momento que atraviesa como club. Un dulce trayecto al que se unen los cadetes, que jugaran sector en Granollers también estos días, y que pueden poner el broche de oro a una exitosa -a la par que convulsa- temporada.

"Es un éxito que el equipo sea campeón de Liga, de Copa y se plante en una fase de ascenso"

Entrenador de Anaitasuna femenino

"Vamos a ir a por todas, a pelearlo. Estamos muy motivados para ganar esta fase"

Entrenador del Helvetia Anaitasuna