Frascati (italia) - El ciclista vitoriano del Movistar Mikel Landa sufrió ayer una caída en una rotonda en los últimos kilómetros de la cuarta etapa del Giro de Italia, lo que le hizo llegar a la meta de Frascati encima de la bici de su compañero Lluís Mas con el culote rasgado y erosiones en la cadera y el brazo izquierdo.

En declaraciones al diario AS nada más terminar la carrera, el vasco explicó que el accidente se debió a que “el puto Yates es un retrasado y va como un loco, me tiró”, declaraciones que luego quiso matizar en la red social Twitter. “Pedir disculpas a todos los aficionados y en especial Simon Yates por unas palabras sacadas de contexto” tuiteó el de Murgia.

El ciclista inglés quiso contestar quitándole hierro al asunto. “No te preocupes, entiendo que se dice en el calor del momento”, respondió.

Polémica aparte, el del Movistar restó importancia a sus heridas que no creen que sean “nada”, dándole más importancia al hecho de que hay “tiempo perdido”.

“Ahora me he sitúo a casi dos minutos de Roglic. Es un inicio muy complicado. Las sensaciones son bastante malas con esta desventaja en contra”, sentenció. - D.N.