Pamplona - Hoy a las 17.30 dará la salida de la 33ª edición de la Vuelta a Pamplona, uno de los eventos más importantes de la categoría júnior en el panorama nacional. Durante las cuatro etapas, en las que se cubrirán un total de 332 kilómetros, los corredores más potentes de la categoría lucharán por enfundarse el preciado maillot verde de líder de la carrera.

200 ciclistas de 17 y 18 años, enrolado en las 33 escuadras invitadas a la prueba por parte de la organización, tomarán parte de uno de los eventos ciclistas más importantes de Navarra. El prestigio de la carrera pamplonesa facilitará a los corredores que más destaquen su paso a la categoría superior de cara a la próxima temporada.

Jenson Young, segundo en la edición del año pasado, se presenta en Pamplona como uno de los corredores a tener en cuenta. Su equipo, el HTM, se postula como uno de los bloques más sólidos de los que se presentarán hoy en La Morea. Mikel Retegi (Lizarte-Ermitagaña), líder del torneo Euskal Herria, parece la mejor baza local en la carrera. Igor Arrieta (Sakana Group), que disputa el Campeonato de Europa con la selección española, no estará finalmente la Vuelta a Pamplona. Pablo Castrillo -hermano de Jaime Castrillo, ciclista profesional y vencedor de la carrera en 2014-, también del equipo anfitrión, suena como otro posible vencedor de la prueba. Otros nombres a tener en cuenta son el escalador alavés Ibai Ruiz de Arcaute (Arrabarrak), Enekoitz Azparren (Ampo) o el brasileño Vinicius Rangel (Valverde Team) entre otros.

La carrera ofrecerá un gran espectáculo a los aficionados que se acerquen a presenciar las etapas de esta edición. La anarquía habitual en la categoría y, por ende, la dificultad para predecir el devenir de la contienda, harán de la carrera un espectáculo digno de las mejores carreras ciclistas del mundo. Probablemente, el resultado de la clasificación general esté en el aire hasta el último metro de la cuarta etapa.

La carrera tiene en su palmarés a ciclistas de relumbrón. Enric Mas, segundo en la última edición de la Vuelta a España, triunfó en Pamplona en el año 2012. Mikel Aristi y Mikel Iturria, vencedores de las ediciones de 2010 y 2011 respectivamente, son dos de los ciclistas de referencia del equipo profesional Euskadi-Murias. Años antes, Imanol Erviti triunfó en 2001 e Iban Mayo consiguió la victoria en 1994.

En la última edición de la carrera, Josu Etxeberria se llevó la victoria. El ciclista de Iturmendi ganó la primera etapa y mantuvo el liderato en la segunda. Sin embargo, en el tercer parcial perdió el maillot y, un ataque en el momento oportuno de la última jornada lo coronó como vencedor de la edición. Ahora, el corredor sub-23 del Caja Rural, es uno de los ciclistas más prometedores de la categoría amateur.

1ª Etapa. La Morea E. Leclerc-Mutilva. En la siempre nerviosa primera jornada, los corredores tendrán que afrontar en tres ocasiones el Alto de Aranguren, de 3ª categoría y, por dos veces, el muro de Badostáin por su vertiente más empinada (500 metros por encima del 10%). El trazado urbano de los primeros kilómetros y los pasos por la localidad de Mutilva crearán nervios a los equipos.

2ª Etapa. Etxarri Aranatz-Etxarri Aranatz. La segunda jornada recupera este año un recorrido menos nervioso que en la pasada edición. Tras más de 50 kilómetros llanos por el valle de la Sakana -especial atención al bucle con piso de hormigón entre las localidades de Etxeberri y Etxarren-, los corredores afrontarán el alto de la Cadena (3,4 kilómetros al 5,7%) y el muro de Unanu (600 metros con picos del 15%), que viene precedido de otras dos pequeñas ascensiones que se encadenan.

3ª Etapa. Sarriguren-Alto de Txoribar. La etapa que, sobre el papel, debería marcar más diferencias entre los hombres que luchen por la general, vivirá unos primeros kilómetros nerviosos con mucha travesía urbana y el paso por un tramo de sterrato de 700 metros. Después, las dos ascensiones por el alto de Aoiz seleccionarán un pelotón que, probablemente, todavía sea numeroso antes de afrontar el temible Alto de Txoribar (1,2 kilómetros al 14%), meta de la penúltima etapa de la vuelta.

4ª Etapa. Pamplona-Pamplona. La jornada de menor dificultad, pero la más decisiva de la carrera, saldrá desde la plaza del Ayuntamiento de Pamplona y finalizará en el paseo del Redín. El recorrido, con repechos pero sin subidas importantes, transcurrirá por los valles de Ulzama, Basaburua y la Cuenca de Pamplona.