La última etapa de la 35º edición de la Vuelta a Pamplona acabó con la victoria del ciclista guipuzcoano Iñaki Errazquin en la subida al Redín. Junto a él cruzó la meta Beñat Carbayeda, que gracias a haber conseguido mejores resultados en las jornadas anteriores firmó la victoria final en la clasificación general.

El pelotón de más de 180 ciclistas comenzó a pedalear en el Ayuntamiento de Pamplona en el último día de la prueba masculina El catalán Marc Rubirola partía con la misión de defender la diferencia mínima de que le permitía mantener el maillot de líder. A tan solo 4 segundos se encontraba un grupo de siete ciclistas y a 40 segundos un grupo más numeroso.

La etapa comenzó con un ritmo vertiginoso. Se sucedieron los ataques y muchos equipos trataron de meter a algún corredor en la fuga. Los ciclistas que ocupaban las posiciones cabeceras en la general sabían que las diferencias eran mínimas y quisieron evitar cualquier sorpresa. Sus compañeros se pusieron a trabajar y el pelotón echó por tierra los numerosos intentos de fuga.

Una caida en el kilómetro 10 provocó una montonera e hizo que el pelotón se dividiera en dos. La cabeza de carrera aumentó el ritmo e impidió que el segundo grupo contactase en lo que restaba de etapa.

Al comenzar la ascensión al alto de Cía se volvió a dividir en dos el grupo principal de corredores. El que hasta ese momento era líder de la Vuelta, Marc Rubirola, comenzó a mostrar su debilidad y perdió la cabeza de carrera. Carbayeda y Errazquin, a 4 segundos del maillot amarillo, aprovecharon la situación y se lanzaron en la bajada.

Las diferencias eran mínimas, pero los dos ciclistas guipuzcoanos pusieron toda su energía y abrieron un hueco de 30 segundos con el grupo perseguidor. El fuerte repecho de Erroz era la prueba definitiva para conocer el estado de forma de los ciclistas y la pareja formada por Carbayeda y Errazquin la superó con nota. El grupo perseguidor perdió efectivos y once ciclistas comenzaron la bajada por delante de un tercer grupo más numeroso.

Tras 15 kilómetros escapados, la pareja de cabeza entró en Pamplona manteniendo una considerable diferencia con el grupo perseguidor y los dos ciclistas escapados se empezaron a analizar. Errazquin sabía que no le valía llegar a meta junto a su compañero de fuga para ganar la general, tenía que arañarle unos segundos. Pero el ciclista de Lasarte no se descolgó de su rueda y llegaron juntos al último tramo de carrera.

La subida por la muralla en los últimos metros de carrera pusieron a prueba la energía de los ciclistas guipuzcanos, pero ambos superaron la fuerte pendiente manteniendo la diferencia con sus perseguidores. A falta de 5 metros de cruzar la meta Errazquin y Carbayeda estaban a la par. Un arreón final del ciclista de Usurbil le permitió superar a Carbayeda y llevarse la etapa, pero no abrió la distancia suficiente como para arañarle segundos en el reloj de la general. Carbayeda no logró ganar la etapa, pero, tras conseguir mejores resultados que Errazquin en las jornadas anteriores, firmó el maillot amarillo.

En los diferentes grupos perseguidores llegaron Ibai Azanza,el pamplonés mejor clasificado, y Unai Garro, el mejor navarro en la general.