Pamplona - Con la posibilidad de que el ascenso directo de Osasuna quede sellado de manera matemática el próximo domingo por la tarde, la directiva del club navarro ya trabaja en la organización de una eventual celebración del retorno rojillo a la máxima categoría. Sin embargo, teniendo en cuenta que la opción pasa primero por un triunfo del equipo de Arrasate en Alcorcón, los rectores de la entidad quieren llevar todo este asunto con la mayor de las cautelas para que los hipotéticos festejos no afecten al rendimiento deportivo de los jugadores en el partido del próximo sábado.
Conscientes de que Osasuna puede confirmar su ascenso directo en cualquier momento, los directivos quieren estar preparados para la celebración del éxito con la afición. Pese a que desde el club consideran harto complicado que el retorno a Primera del equipo quede sellado el próximo domingo, lo cierto es que la habitual reunión que la junta suele celebrar los martes de cada semana para tratar asuntos relativos a la entidad va a servir para cerrar el dispositivo de una eventual celebración.
No obstante, y haciendo hincapié en que lo prioritario es el partido del sábado en Alcorcón, desde el club tienen la intención de llevar todo este asunto de la preparación de los eventuales festejos con la mayor confidencialidad posible, aunque reconociendo que, en caso de producirse el ascenso este mismo domingo, habrá una celebración pública. Y atendiendo a los dos últimos ascensos de Osasuna, el de la temporada 2015/2016 y el de la 1999/2000, todo apunta a que los jugadores se darán un paseo por las calles de Pamplona para poder compartir su éxito con la afición, un proyecto de fiesta que podría servir para fines de semana venideros en el caso de que el ascenso se retrase. - J.L.