PAMPLONA. - Maitane Zalba cumple su segunda temporada en Osasuna. Desde que empezó como jugadora en la ikastola San Fermin y se puso como portera para suplir un hueco en la selección navarra, ha sido campeona de España sub-12 y ha jugado en dos clubes antes de llegar a Osasuna. Cuando iba con sus padres a El Sadar, nunca imaginó que algún día estaría ella en la portería.

¿Cómo ve la eliminatoria después del 1-0 en Badajoz?

-Todavía quedan 90 minutos y va a estar todo abierto. Salimos al campo un poco atemorizadas por los números del rival, porque era ya el play off, pero cuando empezamos a jugar, vimos que podíamos con ellas, que era un equipo parecido al nuestro.

Fue protagonista de la jugada polémica del partido, ya que el 1-0 pudo llegar en una acción en la que se puede interpretar falta a la guardameta.

-Lo que yo sentí es que yo agarro el balón con las manos, la jugadora me arrolla y en ese momento se me escapa el balón. En ese momento estoy dentro del área chiquita, pero no pita falta y da por válido el gol. Además, ahora que veo las repeticiones, me parece que pudo haber fuera de juego de esa jugadora que me molesta. Eso ya no se puede cambiar, así que hay que pensar que quedan 90 minutos y se puede remontar.

¿Qué supone jugar en El Sadar, con los Indar Gorri detrás de la portería?

-Es muy especial. Los dos partidos me ha tocado la primera parte con ellos detrás y he estado con los pelos de punta. No dejan de animar, no dejan de cantar. Es brutal. Estas experiencias no se olvidan nunca. El ambiente de la grada nos impulsó a ganar los dos partidos. Desde muy chiquita iba con mis padres a El Sadar y ahora estar ahí abajo y cambiarte en esos vestuarios es una ilusión muy grande. Esta temporada está siendo un sueño y no queremos que se acabe.

¿Cómo está repartiendo el entrenador los minutos entre las dos guardametas?

-Mi compañera estuvo lesionada hasta mitad de temporada y a partir de ahí hemos jugado las dos.

Siempre la relación entre los porteros se dice que es diferente. ¿Le ocurre con Jaione Larraiotz?

-Sí. Es una suerte tenerla como compañera y no hay ningún mal rollo. Ella tiene un año más, de edad parecida. Y eso que la edad en este vestuario no ha sido un obstáculo. Nos llevamos todas muy bien y se nota al jugar.

¿Qué mensaje manda a la afición?

-Que la remontada es posible si tenemos el apoyo de la afición, como en los dos partidos anteriores. Lo importante sería marcar y no encajar gol. Ojalá después del partido del domingo nos queden todavía dos más.