tarjetas - El delantero argentino resultó amonestado en el minuto 15 por dar un codazo a un rival en un salto. La fogosidad con la que compite Chimy y el braceo en la disputa de balones altos pudieron costarle la expulsión en una acción posterior muy similar y por la que reclamaron los jugadores del Eibar. En esta ocasión, la pausa para hidratación le vino bien al entrenador de Osasuna para pedir un poco de sosiego al delantero.