Anécdota - El buen ambiente que reina en la actualidad en Osasuna quedó escenificado ayer al término de la sesión de entrenamiento. Con casi todos los jugadores ya en el vestuario, Chimy Ávila se enfundó los guantes de portero y demostró buenas maneras en los lanzamientos que ensayaron Nacho Vidal y Roncaglia. El delantero argentino demostró agilidad y buenos reflejos y ser una buena alternativa en un caso de máxima necesidad. - D.N.