esde ayer el futbol profesional vuelve a su competición. Esas personas a las que llamamos jugadores, entrenadores y árbitros se ponen ya su traje de faena€ y a darle. Me picaba mucho la curiosidad saber cómo cualquier persona de cualquier ámbito se podría tomar esa primera vez después del histórico confinamiento. A mitad de semana mandé un audio a diferentes personas afines a mí y las respuestas no se hicieron esperar.

Partimos de que todos tenían una emoción y una ilusión muy especial para cuando llegara ese día si no había llegado ya. Supongo que en esos vestuarios que este finde se van a llenar otra vez, esas dos sensaciones cubrirán una buena parte.

Mi amigo Gerar me hablaba de adrenalina, euforia e incluso miedo cuando ha vuelto a montar en su moto o Víctor de nervios y felicidad para ese primer día de caza. No me cabe ninguna duda que nuestros debutantes saben perfectamente de que hablan aunque ni tengan moto ni cacen perdices. Tirando más de deportes de balón, dos amigos, excelentes entrenadores de balonmano y baloncesto (también ellos personas) metían más el dedo en la llaga de esos míster que vuelven ya a la carga. Hablaban de miedo o incertidumbre pero enseguida arreaban con motivación, más preparación y hambre para esos nuevos retos. Se notaba que eran míster, sus audios eran como una charla de vestuario€sólo les faltó el grito. No quiero ni pensar como estarán los que debutan ya.

En los audios de los jugadores había de todo, desde la jugadora de básquet que en 2 minutos se enchufaba y se comía el partido con patatas hasta la de futbol que cree que no estaría tan fina con balón. Un árbitro me pedía pretemporada y un portero me habló de confianza en sus primeras acciones del partido.

Un buen amigo mío , pintor , creador y lo que haga falta, me mandó 7 minutos de audio que bien podía ser obligación para todos los ciudadanos escucharlo estos días. Palabras como redescubrirse, reseteo o volver a esa primera vez me hicieron creer que lo mejor está por llegar. Por cierto, mi amigo el del dron casi no se atreve a sacarlo€pero eso es otra historia.

El autor es técnico deportivo superior