on el fin de hacer una investigación se fotografió a unos cuantos hombres de manera diferente. Primero una foto recién afeitados, como el culito de un nene que se dice. A los 5 días sin afeitar se les hizo otra foto, a los 10 días otra y a las4 semanas la última ya bien barbudos.

Con este puñado de fotos y la opinión de 8500 mujeres la investigación sacó unos datos que determinaban como gustaban los hombres a las mujeres. No creo que esos datos tengan la verdad absoluta ni mucho menos pero quizá si sacaban alguna conclusión sobre el gusto de una mujer hacia la barba de un hombre.

Seguro que si eres mujer ya estás pensando en tus gustos y si eres hombre es fácil que te hayas tocado el rostro a ver como llevas tu barba porque seguramente ni te acuerdes.

Antes de empezar con lo nuestro y por si les interesa el dato les cuento que a las mujeres menores de 25 les gusta más que su txabal este suavito de cara y bien afeitado. A partir de esa edad el personal femenino encuestado se decantó claramente por esa barba de 5 días antes que por cualquier otra opción. Sus motivos tendrán.

Los futbolistas muy dados siempre ha marcas tendencias, modas y ese tipo de cosas dan mucho juego tanto con el balón y con sus cuchillas de afeitar.

Allá por los años setenta y ochenta los bigotes del Tato Abadía, Del Bosque, Stielike, Carmelo o aquel guaperas rubio alemán Bern Schuster eran lo más y supongo yo que gustarían también por mucho que a mí me cueste entenderlo.

En aquellos tiempos los jugadores los veíamos en los cromos, un ratito los domingos por la noche sus mejores jugadas y poco más. A 2021 es fácil que estés comiendo en tu casa un plato de sopa y te aparezca la imagen de Sergio Ramos o de Leo Messi unas 50 veces por televisión y además con unas barbas que mejor te comas la sopa rápido.

Está claro que hoy en día sus barbas y las de muchos otros futbolistas son una tendencia, no sé yo si esta vez el resto de los mortales les hemos seguido. Me da la sensación que muchas de nuestras barbas son más por pereza que por tendencia pero si aun así gustan a quien tienen que gustar…pues mucho mejor. Todos contentos.

El autor es técnico deportivo superior