Después de un Honda Civic que es toda una demostración de espíritu deportivo, estaba claro que el SUV compacto de la marca japonesa necesitaba dar un paso al frente y crecer en dinamismo, prestaciones y carácter, todo ello para dejar bien claro que en la firma nipona también piensan en el disfrute al volante además de en la eficiencia y funcionalidad de sus automóviles. Así que antes o después era previsible que viéramos aparecer el delicioso motor de gasolina 1.5 i-VTEC Turbo de 182 CV dentro de la carrocería del exquisito HR-V.

Como era de esperar, Honda también ha aprovechado la ocasión para introducir mejoras destacables para configurar lo que ellos definen como un modelo compacto dotado de un “elegante diseño exterior con la presencia robusta de un SUV, motores eficientes y potentes para una conducción más gratificante, con un interior sofisticado, espacioso y versátil, así como con un completo conjunto de avanzadas tecnologías”.

Comenzando por lo más goloso, hay que hacer mención a su nuevo propulsor turboalimentado 1.5 i-VTEC de 182 CV (sólo en la versión Sport), que se suma al gasolina atmosférico ya conocido de 130 CV, 155 Nm y 6,6 litros de consumo medio, estando ambos disponibles con caja de cambios manual de seis marchas o una mejorada transmisión automática de variador continuo CVT. El motor sobrealimentado dispone de 182 CV a 5.500 rpm y 240 Nm de par máximo entre 1.900 y 5.000 vueltas con la caja de cambios manual o de 220 Nm entre 1.700 y 5.500 giros con la CVT. Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 7,8 segundos y estirarse hasta los 215 km/h con el cambio manual, datos que se fijan en 8,6 segundos y 200 km/h con el automático, quedando los consumos medios establecidos entre 6,7 y 7,1 litros (ciclo WLTP, el más ajustado a la realidad).

En el capítulo reservado al diseño, el HR-V 2019 destaca por una estética exterior que acentúa su carácter deportivo, con lo que Honda denomina “Solid Wing Face, con un panel cromado de color negro brillante, tiradores de las puertas traseras ocultos y una nueva versión HR-V Sport que cuenta con un estilo todavía más dinámico”, todo ello sin perder esa imagen tan característica que “combina la elegancia y fluidez de un cupé con la funcionalidad y solidez de un SUV”. Dotado de una excelente aerodinámica y provisto de un mejorado aislamiento acústico, el mayor dinamismo al volante -en el que merece una mención especial la dirección adaptativa electrónica y la suspensión, que responde a las condiciones de la carretera y la conducción, y que en la terminación Sport con la tecnología Performance Damper, según explica Honda, “contrarresta el desplazamiento lateral relativo y el movimiento torsional a través del chasis”- estará siempre acompañado por una exquisita finura de funcionamiento y un confort de marcha muy elevado, dos características siempre presentes en los automóviles de Honda.

Completando el siempre ineludible sentido práctico y funcional de las creaciones del fabricante nipón, el interior del HR-V sobresale por su espacioso habitáculo, el fácil acceso al maletero, de 470 litros, con un portón de amplia apertura y bajo plano de carga, amén de por la sobresaliente versatilidad que le reportan sus asientos dotados del sistema Honda Magic Seats, capaz de competir en capacidad de carga y posibilidades de transporte de objetos voluminosos con los mejores monovolúmenes.

Por último, la seguridad del HR-V, igual que su conectividad, también convence por completo, con mecanismos como: sistema de freno activo en ciudad, avisador de colisión frontal, sistema de reconocimiento de señales de tráfico, limitador de velocidad inteligente que se adapta a los límites de la carretera, avisador de cambio involuntario de carril o sistema de luces de carretera automáticas. Disponible desde 22.150 euros con el motor de 130 CV y desde 30.450 con el de 182 CV y en versión Sport, el HR-V gana claramente en carácter.