sAN sEBASTIÁN - Sábado 25 de julio de 2020. Once de la mañana. El Boulevard donostiarra es un auténtico hervidero. La Clásica San Sebastián en su versión femenina ha arrancado hace ya una hora. Y faltan solo 30 minutos para que comienza la carrera masculina. El epicentro del ciclismo mundial, sin embargo, se sitúa a miles de kilómetros, en Tokio. Allí se están recorriendo los kilómetros finales de la prueba en línea (masculina) correspondiente a los Juegos Olímpicos, cuya llegada se prevé a las 11.15, hora guipuzcoana. Se trata de un escenario muy factible a día de hoy, que los organizadores de la cita guipuzcoana trabajan para evitar.

El pasado junio, la Unión Ciclista Internacional (UCI) comunicó el diseño de calendario de la próxima temporada, en lo que respecta a las pruebas de categoría World Tour (la Clásica es una de ellas). Llamó la atención la situación en la agenda del Tour de Francia, adelantado una semana respecto a lo habitual para despejar las fechas de los Juegos Olímpicos, una circunstancia que produjo idénticos efectos en la Clásica. Ahora mismo, el programa de 2020 sitúa la prueba donostiarra el mencionado 25 de julio. Y a partir de entonces se abre un vacío en cuanto a competiciones de la primera división ciclista que concluye el viernes 14 de agosto, arranque de la Vuelta a España.

El equipo organizador de la Clásica es plenamente consciente de una coincidencia que preocupa en mayor medida en lo que respecta a la prueba femenina (las chicas competirán en Tokio el domingo 26). Y es que en Japón habrá buenos ciclistas, pero los equipos masculinos del World Tour cuentan con estructuras y plantillas amplias para cubrir las ausencias. Estas serán importantes, pero resultarán más relevantes aún en una categoría femenina cuyo ramillete de estrellas mundiales tiene un tamaño más reducido. ¿Posibles soluciones? Las pruebas contrarreloj de Tokio se celebrarán el miércoles 29 de julio, lo que deja huérfanos de carreras World Tour los fines de semana del 2 y del 9 de agosto. Comunicado ya el calendario, se antoja difícil mover sus fechas. Pero los responsables de la Clásica tienen previsto dirigirse a la UCI para plantear el cambio, “al menos de la carrera de las chicas”. Aún falta un año, pero cualquier modificación, de producirse, debería darse en breve. - Marco Rodrigo