- El inédito parón de la NBA -que arrastró a otros deportes profesionales- en protesta por el último caso de brutalidad policial en Estados Unidos (un agente de Wisconsin disparó siete veces por la espalda al negro Jacob Blake), no ha gustado nada al presidente Donald Trump, que ha pasado a la carga contra los impulsores, los jugadores de la NBA.

A este respecto, Trump opinó ayer: “Se han vuelto como una organización política y eso no es bueno. Ni para el deporte ni para el país”, indicó a los periodistas en respuesta a una pregunta sobre la protesta de los jugadores.

“Pero realmente no sé mucho sobre las protestas de la NBA. Lo que sé es que sus índices de audiencia han sido muy malos, porque opino que mucha gente está un poco cansada de la NBA”, concluyó.