Duración 39:10 minutos de juego.

Saques 4 de Rezusta (tantos 1, 17, 19 y 20).

Faltas de saque 1 de Rezusta.

Pelotazos 189 pelotazos a buena.

Tantos en juego 6 de Elezkano II y 15 de Rezusta.

Errores 3 de Elezkano II y 1 de Rezusta.

Marcador 1-3, 1-4, 2-4, 2-5, 3-9, 4-10, 5-20, 8-21 y 8-22.

Botilleros Ander Elezkano (con su hermano, Danel) y Xabier Erostarbe (con Rezusta).

Incidencias Partido correspondiente a los cuartos de final del Manomanista de Primera disputado en el frontón Igarondo de Idiazabal. Encuentro a puerta cerrada.

- El Manomanista evidencia las diferencias entre los pelotaris. Destaca las fortalezas y las virtudes. Las grandes actuaciones son capaces de minimizar hasta al mejor manista y ayer eso ocurrió en Idiazabal. Danel Elezkano se encontró con un Beñat Rezusta sobresaliente. El zaguero de Bergara dominó gracias a su pegada y ni siquiera dejó que su rival entrara en juego. Su poderosa zurda, y también una derecha de muchas garantías, desarbolaron al zaratamoztarra, que se vio obligado a jugar siempre por detrás del cuadro cuatro e incluso el cinco. Lejos de su mejor zona de acción, Elezkano no pudo incomodar al zaguero guipuzcoano y el marcador terminó por reflejar un duro 8-22. El vizcaíno pone fin a su racha de tres presencias consecutivas en las semifinales y Rezusta vuelve a estar a un paso de la final, esta vez con un juego de mucho nivel que le hace ser un adversario a tener muy en cuenta.

El Manomanista, coto cerrado para los delanteros en los últimos años, ya no parece tan infranqueable para los zagueros. Rezusta es uno de los culpables de ello. El zaguero de Bergara se enfrentó a un cabeza de serie como Elezkano y llevó el partido a su terreno. Evitó el juego de aire con su mayor pegada y no dudó en entrar de sotamano para cambiar la dinámica de los tantos. El guipuzcoano mantuvo lejos a Elezkano con su violenta zurda y con la derecha arrimó mucho la pelota a la pared izquierda. Pero el partido de Rezusta no solo fue pegar y pegar. También dejó buenos detalles a la hora de acabar el tanto. Se atrevió con más de un remate de aire y dejó claro que el dos paredes es un arma letal para él, capaz de buscarlo en cualquier ocasión.

La diferencia también fue evidente en el aspecto físico. Rezusta tuvo una marcha más que Elezkano. El bergararra llegó a todas las pelotas y además lo hizo con el suficiente margen para no golpear de manera atropellada. Mientras, al vizcaíno le costó entrar en el partido. El juego de su rival le dejó sin oportunidades y sus primeros tantos fueron un calvario, incapaz de cambiar la tendencia del choque. Rezusta rompió rápido el encuentro y se fue primero hasta el 2-9 y luego hasta el 5-20. Elezkano tiró de orgullo en los compases finales y dejó detalles de sus cualidades. Con el encuentro agonizando y las fuerzas más bajas, el delantero de Zaratamo tiró de talento para hacer una pequeña tacada (8-20), pero su remontada murió en la chapa y ya Rezusta no dio ni una oportunidad más.