l invierno es momento idóneo para recordar esas películas que nos llevan acompañando durante años. Aparte de los conocidos largometrajes como Solo en Casa o los cientos de adaptaciones de Papa Noel, también es tiempo para revisionar las de aventuras. Películas como La Llamada de lo Salvaje (adaptación del libro de Jack London) o la mítica de animación, Balto. Historias que disfrutas desde el calor de tu casa mientras los protagonistas sufren temperaturas bajo cero.

Baltasar Gallardo podría ser el protagonista de algunas de ellas. Este navarro compagina su trabajo en Greenheart, una multinacional dedicada a la alimentación y cuidado de perros y gatos, con su pasión, el mushing, disciplina que consiste en carreras, de corta y larga distancia, de trineos tirados por perros. En 2019, Gallardo participó en la Polardistans, una carrera de 300 kilómetros en los que, de forma autosuficiente, se tiene que completar el recorrido. Celebrada en Särna (Suecia) corresponde al Campeonato del Mundo.

El musher navarro consiguió vencer pero, no sin antes sufrir un gran contratiempo. Cuando apenas había recorrido siete kilómetros se le rompió el manillar del trineo, "algo que no me había pasado en la vida", comentó. "Con un par de narices", consiguió arreglarlo y vencer. El 26 de febrero volverá a participar para revalidar el título. "Después de tantos meses de esfuerzo vamos a poder disfrutar de esto que llevamos preparando desde principios de septiembre", mencionó con ilusión.

Para adaptar a los perros a la nieve, Gallardo se desplazó a Suecia con un mes de antelación. En una furgoneta, con un remolque para los quince Siberian Husky y la compañía de su amigo y musher, Unai Sodupe, recorrieron los casi 3.000 kilómetros que separan Navarra de Särna. No obstante todavía le falta "el cincuenta por ciento del trineo". En cada competición, cuenta con el inseparable apoyo de Carmen Galán, su mujer y la encargada de que todo esté a punto para minimizar los posibles contratiempos. "Si me tocase hacerlo a mí, saldría con la mitad de las cosas que me piden", bromeó.

En un trineo van muchas cosas: las almohadillas de los perros -más de cien-, comida, snacks, piezas de repuesto, etc. Cármen también es su apoyo desde la furgoneta, aunque en la Polardistans Gallardo estará solo. "Si no fuese por ella no me movería de casa ni un metro, es parte fundamental del equipo. Le encantan los perros pero no le gusta la competición", reiteró Gallardo.

Entre los dos llevan la delegación española de Greenheart y, mientras el musher está en Escandinavia, es Carmen la que se encarga de la gestión de la empresa. Un par de semanas antes de la Polardistans ella viajará a Särna para empezar con los preparativos. Hasta entonces, Gallardo se encarga de aclimatar a los canes. En septiembre, empezó el entrenamiento, pero en un terreno completamente distinto. "Al principio entrenábamos mucho por Pamplona y alrededores, últimamente nos vamos a las Bardenas para poner los perros en el punto óptimo", explicó, ya que el suelo es "muy bueno y me permite hacer muchos kilómetros sin que se resientan".

Previo a la Polardistans, Gallardo participará del 17 al 20 de febrero en la Admunsen Race en la que aclimatará a su equipo para el verdadero reto. "Me va a servir de preparación para el Campeonato del Mundo", anunció acerca de la gran carrera en donde se va a tener que enfrentar con diez participantes de cinco países diferentes. "Hay gente muy potente que incluso ha participado en la Iditarod, la famosa carrera de las mil millas de Alaska. Pero también lo había la otra vez, cuando quedé campeón". No obstante, en esta ocasión no podrá contar con su equipo titular.

"Todos los perros son nacidos en casa o comprados de cachorros". Y no cualquier tipo de animales. Gallardo lleva años metido en el mundo del mushing y sabe donde buscar al mejor equipo. "Suelo adquirirlos a un amigo sueco, que es una referencia a nivel mundial", mencionó. De su camada, cuatro pertenecen a un prestigioso kennel (lugar donde crían animales) escandinavo que tienen los mejores Siberian Husky del mundo, puras razas que cumplen con todos los estándares.

"Cualquier perro de Escandinavia puede costar entre 1.500 y 2.000 euros", informó Gallardo. Para él, el precio lo merece. "Si ves de donde provienen, llegarías a los perros del mítico Leonhard Seppala, el que llevó las vacunas a Alaska. Una genética increíble". Unos animales crecidos en la nieve y que no entienden de dosificar esfuerzos. "Generas una unión con ellos que con una persona desconocida no sería igual. En las competiciones acaban dando más de lo que puedes pensar".

Esa conexión animal-humano requiere de muchos años de entrenamiento, cuidados y diversión. Para ello, es necesario empezar de cachorros. "Es una cuestión de aprendizaje que se hace a lo largo de muchos años. Tienes que buscar afinidad en los tiempos de juego para luego ir poco a poco a poco metiéndoles carga", detalló. El objetivo es que acaben siendo los mejores perros de carga del mundo. Para ello hay que aclimatar al animal, no solo al trineo, sino también a sus nuevos compañeros. "No puedes incorporar de golpe en una manada de 15 perros a uno que ha crecido fuera de ese ambiente".

En septiembre comenzó con la preparación para el Mundial después de dos años sin actividad competitiva. "Hemos ido progresivamente. Empezamos con distancias pequeñas, de seis o siete kilómetros, cuatro o cinco veces a la semana". En este último mes previo al Campeonato del Mundo subió la carga de trabajo a entre veinticinco y cuarenta kilómetros. La pandemia truncó muchos de sus planes, así como cortó de raíz la carrera deportiva de varios perros que se encontraban en plena forma. "Se han hecho mayores. A muchos les ha venido bien porque eran jóvenes, pero a otros no. Es una pena porque la vida deportiva de un perro es corta y es un gran hándicap". Para la Polardistans ha tenido dos bajas. "Ha sido inesperado, son lesiones muy sensibles. Cuando empiezas eliminando miembros del equipo de ese nivel, es partir con desventaja. Es como si a Osasuna le dices que no puede contar ni con David García ni con Lucas Torró", lamentó.

Gallardo es la única persona de España que realiza esta modalidad, sin embargo, sí que hay más mushers que se dedican a competiciones de velocidad y que cuentan con el respaldo de la Federación Española de Deportes de Invierno, algo que de lo que él no goza. "No tenemos ningún tipo de apoyo. Las carreras de esprint o de media distancia son más populares, pero menos costosas. No puedo hacer nada".

Su principal fuente de ingresos llega de su trabajo. Greenheart subvenciona gran parte de los gastos mediante publicidad. En las competiciones tampoco puede acceder a recibir premios en metálico, ya que casi ninguna los da. Normalmente, los premios consisten en equipamiento o alimentación para los perros.

Por su parte, la Federación Navarra de Deportes de Invierno sí que ayuda con la inscripción así como, si consigue podio, podrá optar a ayudas del Consejo Superior de Deportes. Por último, el Gobierno navarro también le otorga ayudas si termina entre los tres primeros. A la falta de ingresos, hay que sumarle la elevada cantidad de los gastos "Un trineo cuesta alrededor de 4.000 euros, más el cuidado de los perros, más los desplazamientos. Hago cerca de 220 kilómetros al día para entrenar". Gallardo no es de poner excusas y pese a todos los condicionantes negativos que pueden rodearle a pocos días del Campeonato del Mundo, su experiencia y confianza serán sus principales aliado, eso y sus Siberian Husky.

Candidato. Entre el 26 de febrero y el 6 de marzo, Baltasar Gallardo será uno de los diez mushers que se enfrentarán a la Polardistans, carrera que corresponde al Campeonato del Mundo. Gallardo ya consiguió en 2017 hacerse con el título, algo que buscará repetir. La carrera se disputa en Särna (Suecia) y cuenta con dos modalidades, 150 y 300 kilómetros. El musher navarro participará en la segunda, en un formato non-stop en donde no podrá ser asistido ni ayudado por ninguna persona hasta que cruce la línea de meta. "Es un trabajo de muchos meses, días y días entrenando para esto. Estoy preocupado por las lesiones pero ilusionado por volver", señaló.

"Después de dos

años, vamos a volver

a disfrutar de una competición"

"He tenido dos bajas de última hora. Es como si a Osasuna le quitas a David García y a Torró"

Musher navarro campeón del mundo