bilbao - “Estoy bien, pero todavía queda un mes”, recita con cautela Mikel Urrutikoetxea (Zaratamo, 1989). El delantero vizcaíno hace referencia al Campeonato Manomanista que comienza el próximo viernes 19 en el frontón de Labastida, construido a imagen y semejanza del Bizkaia de Bilbao, aunque a escala más pequeña. El puntillero de Baiko Pilota es una de las grandes bazas de empresa y actuará como cabeza de serie. Las hostilidades le llegarán el 5 de mayo. Después de quedar apeado del Campeonato de Parejas en la primera ronda y de arrastrar unas semanas de baja por mal de manos, el vizcaíno está inmerso en el proceso de rodaje de cara a la cita más importante de la temporada, la que da y la que quita, la que marca qué deportista carga con el peso del colorado anual. Mikel conoce ese sabor. Lo probó en 2015. Quiere más. El hambre es permanente. Otro asalto.

“He realizado varios ensayos junto a Iñaki Artola, Unai Laso y Oinatz Bengoetxea -se ejercitaron en el frontón Bizkaia de Bilbao el pasado martes, después de la presentación en el Guggenheim-, pero las sensaciones que hoy son buenas no sé cómo podrán ser cuando me toque empezar”, revela el campeón de Zaratamo. De hecho, dos de los nombrados por Urrutikoetxea, Laso y Bengoetxea VI, están encuadrados en su misma rama. “Las sensaciones están siendo buenas. Sobre todo, he olvidado ya el mal de manos que sufrí en el Parejas. Me costó recuperar y lo pasé mal. Por ahora, llevo ya tres partidos y me siento cada vez mejor”, confiesa el zaratamoztarra. No conoce la derrota: reapareció en El Villar de Arnedo en buena lid y coleccionó triunfos en Ataun y Bilbao. “Físicamente, también me siento bien”, agrega. Además, la enfermedad que pasó en verano está “olvidada”. “En el Cuatro y Medio quedé tercero y me sirvió para pasar página. Aunque en el Parejas no salieron las cosas, tengo otro objetivo y no hay que bajar la cabeza”, dice.

El tercer componente del cuadro de posibles rivales de Urrutikoetxea en cuartos de final será Julen Retegi, un manomanista nato. “Todos los pelotaris pensarán que su grupo es el más fuerte”, desgrana. Contra el eratsundarra como contra el leitzarra suman varias contiendas en las modalidades individuales. Viejos conocidos. Malas pulgas. “A este nivel, cualquiera te puede ganar. Hay adversarios que juegan mucho. Oinatz, por ejemplo, es un gran especialista y ha sido dos veces campeón”, explica. “Al final, te la juegas a un solo partido y todo depende de cómo estés el día en el que te vistes de blanco. Estoy preparando el Manomanista con la misma ilusión que el resto de campeonatos”, afirma el de Zaratamo, quien aclara que “el objetivo de todos los pelotaris es ganar la txapela y estoy con ilusión de conseguirla”.

En cualquier caso, Urrutikoetxea ve muy lejano que le coloquen la etiqueta de “favorito” al trono de Jokin Altuna. “No me veo como favorito, porque hay pelotaris que también juegan mucho a toda la cancha como Oinatz, Altuna III, Iker Irribarria, Joseba Ezkurdia...”, recita el vizcaíno, quien considera que “el golpe es fundamental, pero no lo es todo”. “Hay otros manistas que tienen otro tipo de virtudes y las aprovechan muy bien. Cada uno saca lo mejor de sí mismo”, manifiesta el de Baiko Pilota, que jugará todos sus partidos en Bilbao, suceda lo que suceda. “Se agradece jugar cerca de casa porque significa que es un desplazamiento corto, pero habría jugado muy a gusto en cualquier otro frontón si así lo hubieran designado”, explica Urrutikoetxea.

LA FALTA DE AIMAR La baja más sensible del Manomanista será la de Aimar Olaizola, cuatro veces campeón (2005, 2007, 2012 y 2013), que cede su puesto de cabeza de serie a Urrutikoetxea. “Se le echará de menos, porque es un pelotari que siempre está arriba. Somos amigos y siempre me ha ayudado”, analiza.