pamplona. La plantilla de Gamesa está preparada "para pelear hasta el final" por sus 150 puestos de trabajo. Así lo explicó ayer el presidente del comité de empresa, Ubaldo Sola, quien dejó claro el rechazo al cierre de la planta anunciado por la multinacional y exigió alternativas para una empresa "viable, productiva y que en enero se encontraba trabajando "al 95% de su capacidad productiva". Este extremo no fue confirmado por la empresa, que señaló que, de media, las plantas de Gamesa trabajaba al 60% de su capacidad: 11 palas a la semana frente a un tope de unas 17.

Sola, que estuvo arropado por siete de los otros ocho miembros del comité de empresa, recalcó que el cierre de la planta "es un problema de pura voluntad empresarial, sólo sustentado en la avaricia de un grupo de empresas que en 2009 ganó 114 millones de euros" y que prevé mejorar sus resultados en los próximos ejercicios. La división a la que pertenece la fábrica de Alsasua, Gamesa GIT, ha obtenido en los últimos años, según explicó el comité de empresa, beneficios por valor de 105 millones de euros. El comité entiende asimismo que la planta "es adaptable" y que, de hecho, ha fabricado "cuatro tipos de palas distintos" en sus 14 años de historia.

El comité de empresa destacó del mismo modo el perfil altamente cualificado de la plantilla de Alsasua. "Muchos hemos ejercido labores de monitor en otras plantas del grupo en todo el mundo". Sola destacó asimismo la calidad con la que se trabaja en la planta alsasuarra y señaló que ésta se encuentra preparada para desarrollar, por ejemplo, partes de la pala que está previsto fabricar en Aoiz. "Podemos afrontar además la reparación de otras palas", añadió.

Ante esta situación, el comité exige a la empresa que retire el Expediente de Regulación de Empleo y que reconozca al comité de Alsasua como único interlocutor legal de la plantilla, representada por siete delegados de ELA y dos de LAB. Los trabajadores de la planta no desean que el cierre de la planta sea negociado, en una mesa común, junto a los ERE de suspensión de las plantas de Tauste (Zaragoza), Miranda de Ebro (Burgos), Sigüeiro (A Coruña) y Medina del Campo (Valladolid).

Por ello el comité reclamó al Gobierno de Navarra que reclame su capacidad competencial para tramitar el ERE, que la empresa ha presentado en Madrid, al afectar a plantas de diferentes comunidades. "La documentación que nos han presentado hasta el momento resulta muy incompleta", añadieron.