Detrás del simple hecho de meter unas monedas en una máquina expendedora para compra una lata de refresco o de recibir el cambio en un parquímetro hay horas y horas de trabajo de ingeniería. Esto, sumado a que en los tiempos que corren toda buena noticia empresarial es motivo de celebración, hace estar de enhorabuena a la empresa peraltesa Jofemar. Sus directivos y trabajadores festejan estos días la venta de la unidad 500.000 del monedero compacto J-2000. Además, éste es el primer gestor de cambio para máquinas vending en incorporar cinco tubos para la devolución de moneda.
Los primeros prototipos fueron creados hace más de una década, cuando la mayoría de monederos compactos no ofrecían la flexibilidad de cambio necesaria para países donde el pago con moneda era más habitual que el de billete. La aparición de un monedero capaz de gestionar la devolución de hasta cinco valores diferentes revolucionó el cambio en las máquinas vending. A partir de este momento se crearon varias versiones para hacerlo compatible con todos los protocolos vending del mercado (MDB, ejecutivo y electromecánico) ampliando así las posibilidades de cualquier máquina para aceptar crédito y entregar cambio perfectamente fraccionado.
Si bien el funcionamiento mecánico no ha sufrido una gran variación desde su creación, su mayor modificación fue la incorporación de un cassette de tubos de fácil extracción para un sencillo desmontaje e intercambio. La evolución del mercado llevó a ampliar sus posibilidades de control de elementos: se implementó el control de billeteros y tarjeteros MDB en modo ejecutivo; el control de tubos externos; la salida de contabilidades en modo RS232; telemetría, o salida de datos en modo DEX y EVA-DTS. Compatible con los selectores de moneda Jofemar más avanzados y seguros, siempre se ha utilizado la última tecnología en análisis para una total fiabilidad contra fraudes. Asimismo, el mecanismo es capaz de reconocer el número de ventas y modificar precios.
el reto del euro Según explicaban desde Jofemar, la introducción del euro en la sociedad fue uno de los retos en los que el monedero J-2000 se mostró como "la herramienta vending más útil que un operador pudiese necesitar". Para esta transformación se crearon programas especiales con opciones de funcionamiento y cambio automático de zona; combinaciones de cambio capaces de calcular la conversión automáticamente y controlar en qué momento los usuarios comenzaron a manejar habitualmente la nueva moneda; procesar el vaciado de tubos de la moneda antigua y comenzar el llenado con la nueva.
Hoy, el J-2000 es comercializado en más de 80 países, es el monedero de serie de todas las máquinas Jofemar y miles de operadores lo escogen a la hora de incorporar un monedero en todo tipo de máquinas vending. De esta forma, es uno de los productos estrella de la entidad navarra.
En la sede central de Jofemar, en Peralta, se celebra este hecho como un triunfo de la empresa en su empeño por ofrecer mejores productos para el mercado vending, desde máquinas completas que mejoren y optimicen el rendimiento de cada localización, a accesorios que faciliten la gestión de los operadores. Desde 1971, Jofemar ha mantenido su mentalidad innovadora. En sus instalaciones nació el primer selector de moneda electrónico, las primeras máquinas con voz, máquinas con microondas incorporado, máquinas adaptables a todo tipo de productos y el primer monedero con cinco tubos de devolución. Además, la semana pasada presentó el coche eléctrico Hidronew XXII en la Feria del Coche Ecológico y la Movilidad Sostenible en Madrid.