PAMPLONA. Cuatro empresas (Repsol, Cepsa, Avia-Esergui y el grupo AN) controlan más del 60% de las gasolineras de Navarra. Una cuota de mercado elevada pero inferior, en cualquier caso, a la que poseen las cuatro primeras compañías en la mayor parte de las comunidades y que explica que la Comunidad Foral posea habitualmente los precios medios de los carburantes más bajos de España.

El peso del grupo AN, con 32 estaciones de servicio en funcionamiento en Navarra, tiene también mucho que ver con el ello. Sus gasolineras, surgidas inicialmente como modo de abastecer a los agricultores asociados, figuran entre las más económicas de las más de 220 que jalonan las carreteras de toda Navarra. Con una estructura de costes muy ajustada -en régimen de autoservicio y con apenas una marquesina y el depósito como infraestructura- han logrado ofrecer durante muchos meses precios de hasta siete u ocho céntimos inferiores a las gasolineras de bandera: Repsol, Cepsa y Avia, sobre todo. "Lo que no se descuida es la calidad del carburante, que se compra siempre en CLH", explican desde el grupo.

En número de surtidores, AN ha igualado ya a los que figuran bajo la marca de Repsol (32 en Navarra). Esta empresa, que ganó 2.193 millones de euros en el año 2011, posee sin embargo la propiedad de otras gasolineras: las que trabajan bajo el rótulo de Campsa (once en Navarra, según los datos del Ministerio de Industria, Energía y Turismo), y las nueve de Petronor, de la que Kutxabank posee todavía un 14%. Casi el 86% del accionariado restante está en manos de Repsol.

Éste es, sin duda, el gran actor global del mercado energético, con una cuota de mercado que ronda el 38% en España. En la Comunidad Foral suma algo menos -en torno al 25% de las estaciones y una cifra superior en ventas- pero mantiene una distancia importante respecto a Avia (26 estaciones) y Cepsa (25), los dos siguientes actores en el mercado de las gasolineras de Navarra.

EL RESTO DE ACTORES El caso de Avia es peculiar, al tratarse simplemente de la marca bajo la que se asocian gasolineras de diferentes propietarios. Las más numerosas son las que forman parte de la cooperativa de distribución Esergui, surgida en los ochenta en Gipuzkoa y que hoy abastece a 26 estaciones en Navarra a unas 123 en toda España. Según los datos del registro mercantil, la empresa cerró 2011 con unas ventas de 843 millones de euros, con un beneficio neto de 4,85 millones de euros. Cepsa -424 millones de euros de beneficio en 2011- es, junto a Repsol, el otro gran operador histórico en España, donde otras grandes multinacionales han renunciado a entrar. Shell, unos de los cuatro grandes grupos mundiales, apenas cuenta con tres estaciones asociadas en Navarra.

El deficiente funcionamiento del mercado y la ausencia de competencia real ha sido señalado en diferentes ocasiones como una de las razones que explican que los precios de los carburantes antes de impuestos sean más caros en España que, por ejemplo en Francia. Y el hecho de que Navarra -con un mayor número de actores funcionando- posea unos precios más bajos que comunidades con una renta por habitante muy superior- parece apoyar esta teoría. Pese a que las diferencias en cuanto al precio medio no son muy significativas (en torno a dos céntimos el litro), Navarra poseía en octubre un buen número de gasolineras sensiblemente más baratas que Madrid o Catalunya.

Poco a poco, además, se han ido abriendo camino actores del sector de la distribución que apenas tenían que ver hasta hace unos años con los combustibles. Cadenas de supermercados como Carrefour, Eroski, Simply y E.Leclerc cuentan con sus propias establecimientos, ubicados junto a sus centros comerciales, y que suelen ofrecer habitualmente precios inferiores a la media. El de E.Leclerc, por ejemplo, ofrecía ayer la segunda gasolina más barata de la comarca de Pamplona. Este modelo es habitual en Francia y ha sido señalado por la Comisión Nacional de la Competencia como uno de los factores que explica la fuerte concentración del mercado y el alto precio de los carburantes en España.