Hace 17 años, el 7 de julio de 2008, Nagore Laffage fue asesinada a manos de Jose Diego Yllanes. Para darle —una vez más— la voz que le fue arrebatada, numerosas personas se reunieron ayer en la Plaza del Víncluo de Pamplona para homenajear a Nagore y, al mismo tiempo, a todas las personas a las que han “asesinado, golpeado, violado, acosado o maltratado por el mero hecho de ser mujeres o personas que rompen con la norma heteropatriarcal”, tal y como declaró Teresa Sáez Barrao, fundadora de la asociación Lunes Lilas.
En la concentración se reconocieron los avances y cambios que se han dado, tanto a nivel estatal como en la comunidad de Navarra, en los diecisiete años que han pasado desde el asesinato de Nagore. Sin embargo, se hizo también un llamamiento a seguir aplicando y desarrollando políticas públicas de igualdad y feministas efectivas, a seguir revisando los protocolos de actuación ante la violencia machista y a promover una educación afectivo-sexual y feminista, porque “día sí y día también nos despertamos, estremecemos e indignamos con algún dato relacionado con la violencia sexual”, señaló Sáez,
Por su parte, Asun Casasola, la madre de Nagore, agradeció el cariño que lleva tantos años recibiendo. “No todas las madres tienen la suerte de tener a personas que lleven diecisiete años acompañándolas y haciéndolas sentir tan queridas y apoyadas”, expresó.
Un caso no aislado
El encuentro tuvo lugar en una coyuntura social alarmante puesto que, de enero a junio se han registrado 47 feminicidios en el país, de los cuales siete (uno de ellos acompañado de un niño) sucedieron en el transcurso de 72 horas. En cuanto a denuncias, Navarra ha registrado 1.158 notificaciones por violencia de género de enero a marzo, “a pesar de que para muchos son inventos de feminazis”, criticó Sáez.
Para concluir el acto, Aurora Beltrán y Kai Etxaniz interpretaron en primicia una canción escrita expresamente para Asun y para honrar la memoria de su hija. “Esta es la canción que nadie nunca quiso escribir”, cantaron. Casualmente, el cielo se nubló y comenzó a tronar, “como si alguien ahí arriba estuviera enfadada”, rieron.
"Derecho a disfrutar en igualdad"
Séez ha reivindicado "el derecho de las mujeres a decidir y poder decir no, el derecho a disfrutar en igualdad de todos los espacios y ámbitos de la vida, incluidos los festivos, porque solo el sí es sí". "Estamos aquí reconociendo avances y cambios desde hace 17 años en todo el Estado y también en Navarra en materia de violencia machista, gracias al inmenso trabajo del movimiento feminista en su diversidad. Por fin conseguimos el Centro de Atención Integral las 24 horas a la violencia sexual, centro que seguimos solicitando que lleve el nombre de Nagore Laffage", ha subrayado.
Pero, sobre todo, ha continuado, "estamos aquí para urgir que no se dé ni un paso atrás, que se avance, que Navarra siga siendo un faro al que mirar por el buen desarrollo de las políticas públicas de igualdad y feministas". "Que sigan revisándose y coordinando los protocolos de actuación ante las violencias machistas, que se desarrolle y aplique y amplíe la ley de libertad sexual de manera integral, desde la justicia, pero sobre todo desde la educación afectivo sexual y feminista, con medidas diversas, incluida la autodefensa feminista y el trabajo con los chicos hombres", ha apuntado.
También ha reclamado "el aumento de los recursos y presupuestos para la prevención, sensibilización, formación y atención, garantizando que lleguen a todos los rincones de Navarra, especialmente a las mujeres que estén en situaciones de mayor vulnerabilidad". "Queremos dinero para gastos sociales, no para la guerra", ha reivindicado.
Tras pedir, "una vez más, justicia y reparación", ha añadido que "no queremos que tu memoria, la de ninguna, sea borrada e ignorada". "Estos Sanfermines volvemos a llamar a disfrutar a tope, cada cual como le guste, pero siempre en base a unas relaciones libres de agresiones sexistas, homófobas o racistas. Queremos convivir y vivir, aquí y en todo el mundo. También en Gaza", ha añadido.