pamplona - El secretario general de UGT de Navarra, Javier Lecumberri, afirma que tiene la “sensación” de que la recuperación económica “no ha llegado” y advierte de que “no todo vale para crear empleo”, en referencia al trabajo “precario” que a su juicio se está generando en la Comunidad Foral y en España. “Desearía profundamente que llegara la recuperación económica y que se quedara, como dice Rajoy, pero tengo la sensación de que no ha llegado y de que la que pretenden que llegue no es la que nosotros queremos”, asegura.

Lecumberri es crítico con las voces que anuncian crecimiento económico y argumenta que “lo que ellos llaman recuperación está creando un empleo muy precario, a tiempo parcial, y, en general, con un recorte importante de derechos”.

A su juicio, “una de las consecuencias más terribles de esta crisis es que nos han intentado convencer de que todo vale para crear empleo, y eso no es así”. “No podemos ir a una sociedad dual de grandes ricos y muchos pobres”, defiende.

En cuanto a la recuperación económica en Navarra, se muestra “muy prudente”, ya que la Comunidad Foral se encuentra en “una situación privilegiada, pero dentro de la mala situación general de España”. “No debemos engañarnos, en Navarra los últimos datos nos dicen que de los casi 50.000 desempleados, 17.000 no tienen ningún tipo de prestación y el empleo que se crea es a tiempo parcial y temporal. Por lo tanto, mucha prudencia”, insiste.

Aunque valora que “más vale que vaya reduciéndose el desempleo que lo contrario”, advierte de que “no debemos engañarnos”, ya que “baja el número de parados porque se crea empleo, pero también porque muchos trabajadores inmigrantes y muchos jóvenes navarros están yéndose de Navarra a trabajar a otros sitios”.

Para el líder sindical, el Gobierno foral ha hecho, en esta situación de crisis, “lo que buenamente ha podido”. En todo caso, considera que “podía haber intentado proteger mejor a los ciudadanos más necesitados” y opina que “de esta crisis tenemos que aprender dónde están nuestras fortalezas y nuestras debilidades como economía”.

Entre las fortalezas de Navarra, se refiere a “la potencia del sector industrial”, en el que, según Lecumberri, “debemos seguir avanzando”. Asimismo, alude al sector agroalimentario, “fundamental para grandes zonas de Navarra”, a la industria biomédica, “también fundamental para el desarrollo económico de Navarra”, y a los sectores servicios y turismo.

Además, apuesta por “crear una red industrial que sirva para absorber” el empleo que sale de la red de Formación Profesional y universitaria, que es “muy potente” en Navarra. “Creo que ese es el camino por el que tiene que ir el Gobierno de Navarra y todos, empresarios y sindicatos”, afirma, para añadir que “también es importante crear una red de industria familiar y autóctona porque eso sirve para evitar la deslocalización”. “Un empleo de calidad para realizar un producto de calidad es el futuro de Navarra. Nosotros no podemos competir en empleos baratos ni en empleos precarios, porque siempre va a haber zonas de Europa o del mundo con condiciones más precarias y más baratas que nosotros”, dice.

reformas fiscales Preguntado por la reforma fiscal aprobada por el Ejecutivo central y por la planteada por el Gobierno navarro, Lecumberri es contundente al afirmar que su sindicato las ve con “un espíritu muy crítico, especialmente la que se ha dado a nivel nacional”.

Lecumberri sostiene que “desvían la carga de los impuestos a los indirectos, que pagamos todos los ciudadanos igual, mientras los directos, que pagamos cada uno según nuestro nivel salarial, cada vez son menos progresivos y siempre en interés de los que más ingresos tienen”.

Además, critica que “la lucha contra el fraude fiscal no es uno de los objetivos prioritarios de la reforma fiscal, lo cual es un gran error, entre otras cosas, porque el fraude fiscal, aunque algunos pretendan engañarnos y dar la sensación de que todo el mundo comete pequeños fraudes, el grueso del fraude fiscal está en las grandes fortunas”.

Por otra parte, preguntado por las próximas elecciones forales, Lecumberri expone que le gustaría que Navarra tuviera un gobierno “con estabilidad” y un gobierno “de progreso, con una visión social y progresista de Navarra”. “Para los ciudadanos y trabajadores navarros todo lo que sea estabilidad y progreso es bueno, todo lo que sea incertidumbres y situaciones inestables, es malo”, precisa.

En todo caso, insiste en que como organización sindical, “no compete” a UGT “decir con qué formulas” se debe conseguir ese gobierno. “Desde nuestra visión progresista, social, e internacionalista, esa sería nuestra mejor opción: estabilidad y progreso para poder sacar adelante medidas que beneficien a los ciudadanos navarros”, puntualiza.

En otro orden de cosas, aborda la lucha sindical en Navarra, donde “la división sindical que hay es claramente negativa para los intereses de los trabajadores”. Sin embargo, señala que “es una situación contra la que es muy difícil luchar”. Así, indica que la visión del sindicalismo nacionalista “defiende unos intereses políticos en la línea de la construcción de una nueva realidad nacional, que es totalmente respetable, pero que es contraria a los intereses de los trabajadores”. “Cada vez más en este mundo tenemos que hacer una lucha global, puesto que los empresarios, la economía sí que está globalizada”, insiste.

situación de koxka En cuanto al conflicto de Koxka, Lecumberri opina que “es el ejemplo de esta nueva economía global y sin escrúpulos”. Así, lamenta que “por una mala gestión empresarial, la propiedad de una empresa que ha funcionado bien, con unos trabajadores con unos altos niveles de calidad en el empleo y de especialización laboral, con un producto de gran calidad, haya acabado en manos de unos fondos buitre que lo único que han hecho ha sido desguazar la empresa para poder obtener una gran rentabilidad a corto plazo”.

En esta economía global e internacional, añade, “cada vez es más importante contar con medios que pongan unas reglas de juego y que sean capaces de arbitrar estas situaciones a nivel internacional porque está claro que desde el punto de vista local nuestra capacidad es muy reducida”.

Lecumberri no quiso hablar del futuro de Koxka “porque es un tema muy delicado y ahora mismo hay muchas cosas encima de la mesa y se tienen que tratar con discreción y prudencia”. - E.P.