pamplona - Tras recibir ayer por la mañana el Premio Empresario del Año 2016, Juan Miguel Sucunza Nicasio se trasladó por la tarde hasta Madrid para subir hoy a un avión con destino Toronto, para entrevistarse con su exsocio canadiense de Nucap Industries Inc., quien le presentará un nuevo proyecto. Este ingeniero industrial de 56 años fue distinguido por su gestión empresarial en el grupo de automoción Berkelium, al convertirle en el mayor fabricante europeo de material de fricción, independientemente de los grandes grupos de automoción, y por su contribución al saneamiento y vuelta a los beneficios de Azkoyen. La revista Negocios en Navarra, en colaboración con la CEN, entregó este premio en su 26ª edición. “Durante 30 años, el 80% del tiempo lo he pasado fuera de casa”, reconocía Sucunza, casado con Beatriz Guibert, y padre de cuatro hijos: Gonzalo, Diego, Nicolás y Juan. El Grupo Berkelium, del que es socio y consejero delegado, exporta a 80 países pastillas de freno fabricadas en las plantas de Icer y Sigma Brakes en Pamplona y Tudela; y Azkoyen, de la que es presidente, se mueve en 50 países. “Por ejemplo, a Argelia he tenido que viajar hasta 80 veces. De todos los sitios visitados, me decanto por Italia y EEUU. Aunque ahora viajo menos y me desplazo sobre todo a Madrid”, cuenta Sucunza, quien diferencia las dos vías de internacionalización de ambos grupos. “Azkoyen se ha expandido mediante la implantación, e Icer Brakes, a través de la exportación”. El fabricante de soluciones de pago, control de acceso y máquinas expendedoras factura unos 140 millones y emplea a unos 800 trabajadores, 300 en Navarra; y Berkelium ingresa unos 50 millones, con unas 300 personas.
En 2010 acepta la presidencia de Azkoyen con una deuda de cien millones, y ahora la empresa está en beneficios y siendo uno de los mejores valores en bolsa. ¿Cuál ha sido la clave del cambio?
-A base de trabajar mucho entre todos. El consejo confió en nosotros, al igual que los accionistas, a los que les dijimos que en seis años no iban a recibir dividendos. También destaco el papel de Eduardo Unzu como director general, con trayectoria en Icer Brakes y Nucap, y el de su equipo.
¿Cómo evolucionará el negocio de Azkoyen este año?
-El grupo tiene varias plantas repartidas en diferentes países: en Navarra y Colombia (máquinas expendedoras y soluciones vending); Alemania y Bélgica (seguridad); Inglaterra (máquinas de café) e Italia (de medios de pago). En términos generales, nuestro mercado de seguridad se centra en Alemania, Benelux y Francia. Pase lo que pase, Alemania siempre juega y gana, así que el negocio de seguridad crecerá. La división de medios de pago se sitúa en Italia, país más controvertido y complejo, pero no creo que haya grandes sorpresas, ni negativas ni positivas. En Inglaterra, nos preocupa el brexit, ya que casi englobamos el 50% del mercado inglés de máquinas de café. Nos perjudica que la libra haya bajado, porque repercute en nuestros resultados; pero a su vez nos permite ser más competitivos en el exterior. Por eso, habrá que exportar más. El resto de negocios seguirán estables. Siempre aumentamos por encima del PIB.
Prevé realizar nuevas adquisiciones de plantas en otros países.
-Desde que presido Azkoyen, no hemos comprado prácticamente nada, porque no había dinero. Ahora existe una mejor predisposición financiera. Si hay oportunidad, la analizaremos, y si hay sinergias con Azkoyen, se comprarán.
¿Implantarse en EEUU puede ser una realidad en 2017?
-Si hay oportunidad, se adquirirá planta en EEUU o en otro país, en los términos dichos antes. El mercado americano da respeto porque es muy competitivo y arriesgado. Resulta fácil triunfar, pero se paga cualquier error. Algo vamos a intentar. El consejo está estudiando diferentes opciones. Vamos a contratar a alguien que estudie dicho mercado.
¿Le preocupa la presidencia de Donald Trump para sus intereses?
-No. Tendremos que ver qué proceso elegir para entrar en ese mercado: puede ser a través de la compra de una fábrica; o implantarte a través de otro país como Canadá, pero también habrá que esperar a la evolución de las relaciones comerciales entre Canadá y EEUU.
Azkoyen está presente en Europa. ¿Le preocupan los resultados de las elecciones en Francia o Alemania?
-No soy ni pesimista ni optimista. Si un negocio no evoluciona como se había previsto, no me sirve como excusa unas elecciones. Además, nosotros somos muy pequeños y no estamos tan expuestos a las tomas de decisiones de los gobiernos. Lo importante es que nuestras máquinas no se estropeen y contar con precios competitivos.
Como consejero delegado de Berkelium, ¿detecta algún peligro para el mercado de frenos?
-El mercado de la automoción es muy competitivo y productos de otros países, como China e India, están entrando. Hace diez años, los fabricantes americanos de frenos dominaban su mercado. Ahora controlan solo el 25% y el 75% restante, chinos e indios. Hace una década, no consideraba que estos países eran un problema para la empresa. Pero ahora sí, y si nos pasa lo mismo que en EEUU, sería un desastre.
¿Cómo se puede competir contra estos países?
-Creciendo, intentando reducir costes, trabajando más y haciéndolo mejor. Icer y Sigma Brakes tienen clientes muy buenos que crecen y eso nos permite crecer a nosotros. Ahora, tenemos un problema con uno de nuestros clientes por la entrada de competidores de Turquía, pero con el resto de países crecemos: Alemania, Francia y España.
¿Qué objetivos se propone Berkelium para 2017?
-Nunca hemos tenido objetivos espectaculares en Sigma. No veo problemas en la situación de las plantas para este año.
¿Apuesta por la industria 4.0?
-La veo bien, hay personas de la empresa involucradas y llegaremos a ella, pero no es un objetivo prioritario para nuestra empresa, porque antes tenemos otros proyectos.
¿Qué inversión realizan Azkoyen y Berkelium en I+D?
-Entre un 3 y 4% de la facturación.
¿Qué opina de la reforma fiscal?
-Hay dos cuestiones: nos gusta que el dinero sirva para repartir dividendos a los accionistas y reinvertirlo en la empresa. A Navarra no le conviene esta reforma, porque hace que sea menos atractiva para la llegada de empresas. No nos vamos a ir a otro sitio porque nos suban un 2% los impuestos, estamos en una buena situación. Pero si tuviéramos más problemas, nos lo pensaríamos.
Berkelium se ha asociado con empresas de otros países. ¿Cómo valora estas operaciones?
-De forma positiva. En 2000, se adquirió Industrias ADI, que a partir de 2006 pasó a llamarse Nucap Europe, debido a una joint-venture con la canadiense Nucap Industries Inc.; y en 2010 le vendimos a la propia Nucap nuestra participación. Ahora la planta, ubicada en Navarra, suma unas 200 personas y 40 millones de facturación. Entre 2010 y 2016, Icer Rail se asoció con la alemana Knorr-Bremse, que fabrica el 95% de los sistemas de freno de los trenes de alta velocidad en el mundo, con una facturación de 7.000 millones. En noviembre, decidimos traspasarles nuestra participación, quedándose la planta aquí. A veces, hay que reconocer que uno solo no puede sacar adelante todas sus ideas de negocio y que debe asociarse.