madrid - El exministro del Interior Ángel Acebes aseguró ayer en el juicio por la salida a Bolsa de Bankia que si en algún momento hubiera tenido conocimiento de algún problema o salvedad sobre la viabilidad de BFA o Bankia “yo paro en seco y aquí se formulan las cuentas”.

A preguntas de su abogado, Acebes insistió varias veces en que “no hay referencias de la existencia de ningún tipo de riesgo por la viabilidad de BFA” en ninguno de los documentos elaborados por la auditora externa, Deloitte.

Si hubiese alguna salvedad, “algún párrafo de énfasis, algo, por pequeño que fuera”, estaría reflejado en los informes y actas, algo que no ocurre.

Acebes, que formó parte del consejo de BFA desde el 27 de julio de 2011 hasta abril de 2012, se refirió a un informe elaborado por Deloitte en marzo de 2012, 48 horas antes de que se aprobaran las cuentas, y pocos días antes de que él abandonara la entidad para incorporarse al consejo de administración de Iberdrola.

“Yo sabía que me iba a los pocos días”, relató, “yo no iba a cobrar ya, me iba a otra cotizada, si yo hubiese tenido todas esas responsabilidades, si a mi mínimamente me hubiesen dicho que había un problema, yo paro esto en seco y aquí se formulan las cuentas”.

Asimismo, negó que el socio auditor, Francisco Celma, se dirigiera a él en algún momento para hacerle partícipe de algún reparo.

daño reputacional Acebes aseguró que UPyD “falseó” la querella por las supuestas irregularidades en la salida a bolsa de Bankia para acusarle aún habiéndose incorporado una semana después, y lamentó el daño reputacional que le ha supuesto su imputación, que ha llevado a su salida como consejero en Iberdrola.

Especialmente crítico se mostró con Andrés Herzog, que llegó a dirigir la formación y que ahora representa a la acusación popular de la Confederación Intersindical de Crédito (CIC), por haber aportado un documento fechado “siete meses después” del debut bursátil, y por tanto, de su entrada a fin de amparar las acciones legales contra él, indicó Acebes.

“Saca de la lista a Virgilio Zapatero, exministro socialista y compañero de la que fuera su líder por aquellos momentos, Rosa Díez, y a mi me mete aquí”, afeó ante la sección cuarta de la sala de lo Penal de la Audiencia Nacional en el marco del juicio, en el que se enfrenta a penas de hasta doce años de cárcel por presunta estafa a inversores y falsedad contable, como reclama la propia CIC.

Además se desmarcó de la reformulación de las cuentas de 2011, realizada por el equipo del actual presidente de la entidad, José Ignacio Goirigolzarri, en la que afloraron pérdidas por importe de casi 3.000 millones de euros.

“Yo no voté, ni participé en ellas”, incidió tras aclarar que abandonó BFA el 24 de abril de 2012, semanas antes del relevo en la administración del banco.- Efe