pamplona - El vicepresidente del Gobierno de Navarra, Manu Ayerdi, presidió ayer el acto de la firma del convenio entre el director gerente de la sociedad pública Nasuvinsa, José María Aierdi, y los representantes de Harivenasa, Alberto Loizate y Javier Berazaluce, que permite a esta empresa adquirir una superficie de 113.000 metros cuadrados en la localidad de Etxarren, valle de Arakil, para instalar su futura planta de producción. Con esta nueva planta de procesamiento de materia prima agrícola, Harivenasa prevé crear medio centenar de puestos de trabajo.

Harivenasa, empresa de la industria del sector primario perteneciente al Grupo Caja Rural, tiene como objeto principal de su actividad producir y transformar productos derivados de la avena y otros cereales, controlando el proceso desde el origen hasta su comercialización. Actualmente, cuenta con 50 empleos directos e indirectos en la planta ubicada entre Noáin y Salinas de Pamplona. Con el nuevo proyecto de Arakil, la firma navarra se plantea emplear a unas 50 personas más. En total, serán unos 100 empleos directos e indirectos.

En su labor de promoción industrial, Nasuvinsa ha realizado labores de acompañamiento a Harivensa, en búsqueda de suelo industrial para su ampliación. Finalmente, la sociedad pública, en estrecha colaboración con el Ayuntamiento de Arakil, ha posibilitado la ubicación en la localidad de esta nueva planta. El área industrial de Nasuvinsa adquirió el pasado mes de diciembre en Arakil la citada parcela para poder atender la creciente demanda existente para la implantación de nuevas empresas en Sakana, una comarca especialmente castigada por el desempleo durante la crisis.

Nasuvinsa ha activado una primera inversión de 1,5 millones de euros destinados a la compra de suelo y a los primeros trabajos de urbanización en esta parcela, situada en el concejo de Etxarren (Arakil). Se trata de la segunda actuación que el Departamento de Desarrollo Económico del Gobierno de Navarra en comarca de Sakana tras la regeneración que ejecutó en el área industrial de Irurtzun. En este caso, en 2016, el Ejecutivo foral adquirió la antigua planta de Inasa, tras el cierre de esta fábrica, y regeneró el área para promover un nuevo polígono industrial.

En aquella intervención, de reurbanización y recuperación de suelo industrial, el Gobierno invirtió 7 millones de euros. El área de Irurtzun acoge actualmente la actividad de siete empresas que dan empleo a 240 personas y generan unos 140 millones de facturación anual. - D.N.