El sindicato LAB anunció ayer el inicio de una campaña para defender la libertad y la lucha sindical como herramienta para mejorar la vida de los trabajadores y en especial de los que se encuentran en situaciones precarias o de “explotación”.

Esta campaña es la respuesta de LAB a la “represión” que sufren algunos de sus sindicalistas por parte de la Policía Foral y el poder judicial, dijo en conferencia de prensa el portavoz del sindicato en Navarra, Imanol Karrera. Y así explicó que tienen abiertos diversos procedimientos por denuncias policiales, un delegado ha sido condenado a 21 meses de cárcel por entrar en el local de la Sangiovesa de Pamplona con un megáfono y poner unas pegatinas, y otro espera un juicio a principios de julio con una petición de 2.800 euros de multa por desordenes públicos.

Además Karrera calificó de “despropósito inaceptable” que a un trabajador extranjero de Huertas de Peralta se le acuse de atentado a la autoridad y se le pida por ello 2 años y medio de prisión, 2.500 euros de multa y 5 años de expulsión de España. “Esto es un ataque a la libertad sindical, pero seguiremos defendiendo a la clase trabajadora”, dijo, y recordado que tanto en el restaurante como en la empresa agroalimentaria LAB ha conseguido mejorar las condiciones de trabajo de unas plantillas que, en un caso, habían llegado a “cobrar una pizza” por la horas extras y, en el otro, estaban “sin vacaciones y con jornadas de 13 horas”.

“La Sangiovesa era uno de esos establecimientos hosteleros donde se hacía caso omiso de la legislación laboral: incumplimiento sistemático del convenio, personas trabajando sin contrato, vulneración de las libertades sindicales. Ante esta situación, los y las trabajadoras decidieron organizarse y la empresa impuso la candidatura de UGT y despidió a varias trabajadoras. Sin embargo, tras varias movilizaciones frente a la empresa se revertió esta situación, consiguiendo la readmisión y el cumplimiento del convenio”, explicó ayer el sindicado.

Unas situaciones en las que Karrera lamentó que no intervengan ni fiscales ni policías ni la Inspección de Trabajo, que, “en lugar de eso, van en contra de los sindicalistas”. Por eso, “el reto es organizar una ola de solidaridad que frene estos juicios”, “está en nuestras manos y tenemos la capacidad”, subrayó, y anunció que este jueves frene al Palacio de Justicia a las siete de la tarde será la primera movilización de la campaña que van a llevar a cabo.

Según explicó el sindicato, en el caso de Huerta de Peralta, diferentes policías han impuesto, hasta el momento, 30 multas por valor de 5.600 euros y, lo que es más grave, se han abierto a instancia de la Policía Foral varios procedimientos penales por “desórdenes públicos” y “atentado contra la autoridad” contra tres sindicalistas. En el primero de ellos, la Fiscalía solicita una multa de 2.880 euros para un sindicalista. En el segundo procedimiento contra dos sindicalistas la solicitud de penas están por concretar. Respecto al tercero, contra un trabajador de Huerta de Peralta, resalta por su gravedad la petición de la Fiscalía por supuesto “atentado a la autoridad”: dos años y seis meses de cárcel, 2.500 euros de multa y cinco años de expulsión del Estado español, al tratarse de un trabajador de ciudadanía marroquí. - D.N.