pamplona - Laboral Kutxa ha alcanzado en el primer semestre de 2019 un beneficio neto acumulado de 76,4 millones de euros, lo que supone un incremento del 0,9%. Además, el volumen total de negocio agregado ha experimentado un crecimiento semestral neto de 1.373 millones, lo que supone un 3,92% más desde el pasado 31 de diciembre.

Según informó la entidad financiera, los niveles de solvencia y liquidez siguen siendo “muy destacados”, con un CET1 del 18,38% y una LTD del 71,10%. La morosidad, por su parte, continúa descendiendo hasta situarse en el 4,14%, “muy por debajo” de la media del sector, 5,65% en mayo. El margen de intereses ha alcanzado los 122 millones, un 2,12% menos respecto al mismo periodo de 2018, minoración provocada, en parte, por el impacto de la nueva normativa contable de arrendamientos NIIF16, así como por el efecto de la evolución del euríbor en la cartera hipotecaria.

Siguiendo los criterios de prudencia que caracterizan la gestión de la entidad, entre otras medidas, se ha procedido a la clasificación a vencimiento de las adquisiciones de renta fija en cartera, lo que conlleva una significativa reducción de los resultados por operaciones financieras en el semestre.

De esta forma, la suma de 51,5 millones por comisiones y de 26,5 millones en concepto de dividendos y otras operaciones financieras hacen que el margen bruto se sitúe en 200,1 millones de euros, un 5% por debajo de la cifra obtenida en junio de 2018.

Por otro lado, los gastos de administración han descendido hasta los 110,6 millones de euros y se han rebajado un 2,1% respecto al mismo periodo de 2018.

Tras haber descontado 10,8 millones correspondientes al cálculo de las amortizaciones y 2,3 millones en concepto de provisiones, saneamientos, deterioros e impuestos, el resultado neto consolidado en el primer semestre de 2019 se ha incrementado un 0,9% respecto al primer semestre del pasado año, y supone un beneficio semestral de 76,4 millones de euros, previo a la dotación a los fondos de obra social de la cooperativa. - D.N.