Pamplona - Navarra cerró 2019 con 11.449 coches vendidos, lo que supone un descenso cercano al 13,5% y el primero desde que en 2012 comenzó a recuperarse el mercado del automóvil. El año, que terminó con un diciembre muy similar al de 2018, ha servido, eso sí, para confirmar el pésimo momento del diésel, que apenas supuso una de cada cuatro matriculaciones en la Comunidad Foral. Se trata del dato más pobre para este carburante desde los 90.

De hecho, en el último año, las ventas de coches diésel cayeron otro 35% en la Comunidad Foral, hasta 2.860 coches, frente a los 7.419 de gasolina y los 1.170 que emplean otro tipo de motorizaciones y suponen ya el 10,2% del total, un porcentaje aún pequeño, pero que no deja de aumentar y que lo hará todavía a mayor velocidad en los próximos años. La llegada de nuevos modelos eléctricos, así como la extensión de la red de cargadores, el descenso en los precios y la progresiva mejoría en las baterías, harán que las ventas de este tipo de coches crezca casi un 15%, frente a una caída media estimada para el mercado del 3%.

En el caso de los turismos y los todoterrenos, 2019 certificó un crecimiento superior al 100% para los eléctricos, hasta los 125, apenas un 1% del total de coches vendidos. Los coches híbridos alcanzaron las 798 unidades, un 24,7% más que el año pasado, mientras que los coches gasificados alcanzan las 247 matriculaciones, un 21%, el crecimiento más modesto entre las motorizaciones alternativas.

El descenso fue general en casi todas las marcas, especialmente acusado en enseñas como Nissan, que se dejó una cuarta parte de las ventas. Peugeot, con 973 coches, cierra un año más como líder en el mercado navarro, por delante de Volkswagen, de Opel y de Seat. Con el fin de las matriculaciones para el mercado de exportación y alquiler se hunde Fiat, mientras que asoma, con una cifra aún muy baja Tesla, con 18 matriculaciones.