Todos los sindicatos de enseñanza vasca (ELA, LAB, STEILAS, CCOO y UGT) han convocado una jornada de huelga el día 15 de septiembre y no descartan más paros, en demanda de la negociación de medidas de prevención y de contrataciones que garanticen un regreso a las aulas "seguro".

Los representantes de las centrales han comparecido conjuntamente para criticar "la improvisación" con la que el Departamento de Educación ha preparado el protocolo para el regreso presencial a las aulas en el curso 2020-2021, enmarcado en una gestión "inaceptable e irresponsable; unilateral y no consensuada, tardía y que está generando una situación de incertidumbre permanente en trabajadores, alumnado y familias".

Los sindicatos, que han lamentado no poder garantizar la distancia mínima de seguridad por el covid a los periodistas en la sala, han reclamado al Gobierno Vasco el descenso de la ratio de alumnado, de manera que cada persona disponga de 3 metros cuadrados y un máximo de 10-15 estudiantes por aula.

Para posibilitarlo, han pedido incrementar la plantilla docente y educativa para cumplir esos ratios, y también aumentar la plantilla para garantizar la limpieza continuada de los centros, el funcionamiento del comedor y de los autobuses, así como establecer medidas para "reducir las brechas pedagógicas, sociales, tecnológicas y medios de refuerzo especialmente en euskera", y medidas de protección para trabajadores más vulnerables.

Según han explicado, "los sindicatos somos partidarios de un curso presencial que responda a las necesidades pedagógicas", pero "nos encontramos en una situación epidemiológica preocupante" que requiere "planificar medidas eficaces para garantizar un retorno presencial seguro y poner los medios para hacerlo posible".

"La función de la escuela no es garantizar la conciliación de padres y madres", ha asegurado la representante de ELA, Miren Zubizarreta, quién además ha asegurado que el cambio de la persona al frente del departamento de Educación, dentro del nuevo ejecutivo de Iñigo Urkullu, no conllevaría la retirada de la convocatoria de huelga.

Las centrales han asegurado que para plantearse desconvocar la huelga el Gobierno Vasco debería proponer una negociación de esa vuelta a las clases con "planteamientos que tengan consistencia y con la dotación presupuestaria necesaria".

Han calificado "de insuficiente y propagandístico" el anuncio de la contratación de 1.000 profesores, si bien no han precisado qué cifra sería necesaria para hacer frente a sus planteamientos de reducción de ratios.

Han criticado que Educación haya planteado regresar al curso presencial sin haber determinado en cuál de los tres escenarios que definió en función de la situación epidemiológica se encuentra Euskadi este mes de septiembre.

Por todo ello, los sindicatos comenzarán mañana viernes sus movilizaciones con el registro de la huelga y concentraciones con fotografías colectivas en los centros educativos, el día 10 se concentrarán ante las delegaciones de Educación de Bilbao y San Sebastián, y ante la sede del Gobierno Vasco en Lakua, y han animado a secundar la huelga del día 15, en demanda "de un retorno seguro y consensuado" a las aulas.

Además, han asegurado que no descartan otras medidas, como convocar más jornadas de paro o una huelga indefinida, u otro tipo de movilizaciones "en función de la evolución del curso" y de las medidas que Educación vaya adoptando ante la incidencia de la enfermedad.