- El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, afirmó ayer que la negociación para la fusión de Bankia y Caixabank tiene “buenos mimbres” para ser una operación “positiva” para la economía española, si bien admitió que se está “lejos” de recuperar el dinero invertido en el rescate bancario de 2012, aunque el Ejecutivo tiene el objetivo de maximizar la “participación pública”.

Así lo señaló en una entrevista en TVE, recogida por Europa Press, en la que aseguró que los principales objetivos del Gobierno en materia financiera son: defender el interés general y maximizar la participación pública en Bankia, con el fin de dar “estabilidad y certeza” en el sector financiero. Sánchez explicó que el sector tendrá que abordar un proceso de reestructuración para convertirse en un sector “aún más saneado” y ha precisado que es el FROB y “no el Gobierno” el que tendrá que dictaminar si sale adelante o no la fusión que daría lugar al primer banco de España y el décimo europeo.

Preguntado sobre si el Estado recuperará los 22.000 millones destinado a Bankia en el marco del rescate bancario de 2012, Sánchez reconoció que se está “lejos” de ello y ha aludido a la “herencia” recibida como consecuencia de dicho rescate, que sigue siendo un “asunto pendiente”.

En cualquier caso, aseveró que el objetivo fundamental del Gobierno es “maximizar la participación pública y dar estabilidad a un sector saneado” dada su relevancia para la recuperación, en un contexto de un sector que “ha sufrido por la pandemia y está altamente impactado por la transición digital”.

“De igual forma, sobre las demandas de Unidas Podemos de recuperar el dinero destinado a Bankia y de una banca pública, Sánchez defendió que el “conjunto de la izquierda” busca contar con una banca pública que, a su juicio, ya está “garantizada” con el ICO.

“El sector tendrá que abordar un proceso de reestructuración para estar aún más saneado”

Presidente del Gobierno