El consejero de Desarrollo Económico y Empresarial, Mikel Irujo, y la vicepresidenta cuarta, y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, han mantenido una reunión este jueves en Madrid para conversar sobre los proyectos estratégicos por los que apuesta Navarra para los fondos de recuperación y resiliencia europeos Next Generation.

Entre ellos, ha recordado la apuesta de Navarra por la movilidad sostenible y el objetivo de "orientar las capacidades del sector industrial de la automoción hacia el desarrollo del vehículo eléctrico, autónomo y conectado". Asimismo, ha reafirmado la voluntad de albergar en Navarra una fábrica de baterías para "atraer nuevos modelos de vehículos eléctricos y contribuir al desarrollo de la industria de la automoción en el territorio", ha explicado el Gobierno foral en un comunicado.

Han acompañado al consejero, Uxue Itoiz, directora general de Industria, Energía y Proyectos Estrategicos de la S3; Pablo Ayesa, director general del Centro Nacional de Energías Renovables (CENER), y Miguel Sucunza, presidente de la Confederación Empresarial Navarra (CEN), quien coordina una Oficina Técnica de Apoyo para Proyectos Europeos.

"El compromiso público-privado con la recuperación, además de ser una condición para acceder a los fondos Next Generation, es clave en el establecimiento de bases sólidas para la transformación de nuestro tejido productivo. Es importante que defendamos juntos los proyectos que contribuirán a dibujar el futuro económico y social de nuestro territorio", ha destacado Irujo.

El consejero ha trasladado a la ministra el interés de Navarra por optar a fondos Next Generation para desarrollar varios proyectos en materia de transición energética. A través de los fondos de recuperación y resiliencia europeos, "la transición energética y verde se ubica en el centro de la acción política y económica". "Suponen también la oportunidad de acelerar la transformación de los modelos de desarrollo económico y social para avanzar en los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y en materia de eficiencia energética, de producción de energías renovables y sustitución de las energías fósiles, de movilidad innovadora y sostenible, y de economía circular, entre otros", ha resaltado el Ejecutivo foral.

En este contexto, y siempre desde la perspectiva de una colaboración público-privada, el consejero ha destacado el proyecto de la instalación industrial de reciclaje de palas, "una necesidad no cubierta todavía en el sector de la energía eólica y que contribuiría a la transformación del modelo productivo actual en uno nuevo más sostenible y circular".

Por otro lado, ha trasladado la necesidad de un PERTE (Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica) eólico que "observe el ciclo global, desde la energía, hasta una industria del sector, pasando por la innovación y el empleo, y que contemple la transición de la generación de energía renovable terrestre a marítima que debe abordar la industria conforme a la estrategia de la UE". Esto implica el despliegue de 300-40GW de energía renovable marina en todas las cuencas marítimas de la UE de aquí a 2050.

"Alcanzar una capacidad instalada de 300 GW de energía eólica marina y de 40 GW de energía oceánica de aquí a 2050 supone un cambio de escala sustancial para el sector en menos de treinta años, a una velocidad nunca vista en el desarrollo anterior de otras tecnologías energéticas. Significa multiplicar la capacidad de energía renovable marina por casi treinta veces de aquí a 2050", ha subrayado el Gobierno de Navarra.

En materia de transición energética, principalmente en la descarbonización del transporte y de la industria, el hidrógeno como fuente de energía renovable "es otra pieza clave". En este ámbito, Irujo ha destacado que Navarra tiene varios proyectos cuyo objetivo es "impulsar y desarrollar un tejido industrial en torno al hidrógeno en los distintos momentos de su cadena de valor".

Liderado por AIN y el CENER, el proyecto de planta navarra de hidrógeno verde que se situaría en la Ciudad Agroalimentaria de Tudela, cuenta con el "pleno respaldo" del Gobierno foral y pretende "atraer a numerosas compañías para empezar a generar hidrógeno en 2024". En el futuro, abastecerá de energía limpia a las empresas del parque ribero, a áreas industriales de su entorno comarcal e, incluso, a otras regiones. También ha presentado un proyecto para el desarrollo y uso del biometano en el ambito municipal.

DESARROLLO DE LA INDUSTRIA DEL COCHE ELECTRICO

En materia de movilidad sostenible, ha recordado que el primer reto de la estrategia de especialización inteligente se refiere al sector de la automoción con el objetivo de "orientar las capacidades del sector industrial de la automoción hacia el desarrollo del vehículo eléctrico, autónomo y conectado".

En este sentido, el Gobierno foral ha afirmado que "Navarra destaca por su desempeño industrial, mejorando su competitividad global, incrementando su contribución a la riqueza regional y creando puestos de trabajo de alta cualificación gracias a la integración de las tecnologías 4.0 en el ámbito de la Automoción y de la Mecatrónica; un sector que en 2019 supuso el 11,5% de la producción industrial y el 46% de las exportaciones en la Comunidad foral".

Dichas prioridades se desarrollan mediante "grandes proyectos integrados en los que se propone la colaboración del sector público y privado, combinando actuaciones conjuntas". En este contexto, y teniendo en cuenta la situación estrategica de Navarra, Irujo ha defendido la opción de Navarra como ubicación para acoger una fabrica de baterías. "Un proyecto estratégico de territorio para asentar la apuesta por el desarrollo industrial en torno a la movilidad sostenible en Navarra", ha remarcado el Ejecutivo foral.