Los precios aceleran. Impulsados por la energía pero repercutiendo ya en otras materias primas han llevado el IPC de Navarra hasta el 2,7% interanual, su punto más alto desde diciembre de 2012 y nueve décimas más que el mes anterior. En abril registraron un incremento del 1,2%

El mayor incremento de los precios en abril se produjo en Vestido y Calzado (8,5 %), seguido a distancia por la vivienda (2,9 %), Menaje (1,2 %), Alimentos y bebidas no alcohólicas (0,7 %), Medicina y Hoteles, cafés y restaurantes ambos capítulos con un 0,4 % y Comunicaciones (0,1 %).

Permanecen estables los precios en Transporte, Ocio y Cultura y Enseñanza y bajan en Bebidas alcohólicas y tabaco (-0,5 %).

En lo que va de año el mayor aumento se observa en la Vivienda, con una subida del 11,3%, como consecuencia del incremento de los precios de la electricidad, apunta el Instituto de Estadística de Navarra-Nastat. En el lado contrario se sitúan las Comunicaciones con una caída del -4,7%.

La tasa de variación anual de la inflación subyacente en Navarra (Índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) baja tres décimas hasta el 0,4%, situándose dos puntos y tres décimas por debajo de la del IPC general.

A nivel nacional, la tasa de variación anual del IPC del mes de abril se sitúa en el 2,2%, casi un punto por encima de la registrada en marzo, mientras que la tasa anual de la inflación subyacente disminuye tres décimas, hasta el 0,0%. La variación mensual del índice general es del 1,2%.

Por su parte, la inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) situó su tasa interanual en abril en el 0,0%, tres décimas menos que en marzo y tasa más de 2 puntos inferior al índice general.

Se trata de la mayor brecha entre la subyacente y la tasa general desde agosto de 1986.

En el cuarto mes de 2021, el Indice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) aumentó su tasa interanual ocho décimas, hasta el 2%, mientras que subió un 1,1% en tasa mensual.