Desde el Observatorio 2030, ¿qué puede decir del cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible en la construcción?

-La Agenda 2030 en el sector de la construcción supone una oportunidad y una hipótesis de futuro a la que poder alinear la visión estratégica del sector. Este sector está en un punto de inflexión y tiene que asumir una serie de retos y cambios estructurales. Es importante encontrar unos objetivos comunes que van por la modernización del sector, su industrialización, la sostenibilidad, la reincorporación de la mujer y del talento joven. La Agenda es como una hoja de ruta para el sector muy adecuada en la que podemos apoyarnos para realizar todas las alineaciones que tenemos que hacer.

¿Es un sector masculinizado...?

-Completamente. Cuando pensamos en la construcción pensamos en el ladrillo, en el obrero y en el casco. Esto ha sido así tradicionalmente y es el sector con menor presencia femenina de España donde las mujeres no llegamos al 9% del sector en toda su cadena de valor, desde la fabricación hasta el desmontaje. Es una actividad con un potencial de generación de empleo y de intervenir en la vida de los ciudadanos tremendo, por eso hay que reinventar un poco el sector y aprovechar la oportunidad.

¿Cómo cree que se puede fomentar esa igualdad?

-La igualdad se tiene que promover desde los órganos directivos de las propias empresas. Desde la construcción tienen que lanzar ese mensaje de confianza, tienen que apostar por la modernización para no quedarse obsoletos y, a partir de ahí, será todo más fácil. Lanzar programas de formación es fundamental y un buen relato puede ser atractivo para muchos perfiles.

¿Qué asignaturas cree que se han cumplido de la Agenda 2030?

-Lo único que se ha cumplido es la concienciación de que hay que cumplirlas. Las intervenciones afectan a generaciones futuras y tienen que estar muy bien meditadas y no dejarse llevar por las tendencias. Hay que planificar de una manera más participativa, más integral e involucrando al resto de actores, agentes y administraciones.

¿Y cuáles quedan pendientes?

-Las siguientes asignaturas son que la industria invierta en innovación para transformar sus procesos productivos y reducir su huella y que la industria invierta en formación para hacer más atractivo el sector para jóvenes y mujeres. La industria tiene que contar el relato a los ciudadanos e involucrarlos en el proceso de hacer ciudad. La covid ha hecho más patente lo importante que es nuestra vivienda y nuestro entorno construido, así que cuidémoslo.

“Temo que la concienciación solo la tengan las grandes empresas; el mensaje tiene que llegar a las pequeñas”