LOS percebes son uno de los platos estrella de las navidades. Y aunque según la OCU este año es uno de los alimentos que baja su precio (-27%) de cara a estas fechas no es un habitual en todas las mesas por lo que supone para el bolsillo. Este año se pueden ver a 50, a 70 e incluso a 90 euros. La demanda es alta y la oferta no la cubre. Por ello, ante esta situación, Koldo Zarraga, que trabaja en el sector Horeca, decidió investigar si se podían criar percebes de forma artificial. "Mucha gente pedía, en época de navidades sobre todo, cuando hay mucha demanda y muy poquita oferta, que a ver si le podían conseguir percebes donde fuese, como fuese, al precio que fuese".

Zarraga se puso en contacto con Jesús Estébanez, que trabaja con sistemas de acuariofilia y es un experto en acuicultura, y con Alberto Blázquez, ingeniero de telecomunicaciones que contaba una empresa de digitalización y de mantenimiento de máquinas, para tratar de convertir en realidad lo que tenía en la cabeza. Marta Arana es otra de las piezas clave del proyecto, ella es la CEO la empresa. La comercialización de percebes a día de hoy "no es sencilla", cuenta Arana. "Cuando te pones a investigar te comentan que no hay oferta, que es muy difícil conseguirlos en una determinada época del año y que a veces los que vienen mal se estropean, que el que mejor viene dura cinco días fuera del agua, los que no, te vienen ya medio muertos. Vimos que había un problema", explica.

Por ello, se lanzaron a la aventura de criar percebes de forma artificial, no para sustituir a los naturales, sino para "complementar la demanda que hay". "Nunca van a sustituir al mercado de captura natural. Lo que sí pueden hacer es complementar la demanda que hay. Es nuestra intención, no queremos sustituir, pero sí queremos primero ayudar en la sobreexplotación que existe para que las costas puedan descansar; y segundo, poder sacar un complemento para que el percebe criado en cautividad se asemeje lo máximo posible al natural y pueda suplir la demanda".

Confiesan que el "día a día es sencillo". "Es una mascota que pones en el sistema y básicamente con darles algo de comer no requieren mucho mantenimiento", apuntan. "Sí que nos costó mucho dar con la alimentación específica porque son mezclas de muchos fitoplancton y zooplancton distintos para intentar conseguir que el percebe se desarrolle tal y como lo hace en el mar e intentar acercarnos mucho al sabor que se da en Galicia", ilustraba Zarraga.

Estos socios vizcainos quieren, además de vender en un futuro su producto, poder aportar al ecosistema. "Con las técnicas de cría que tenemos actualmente podemos repoblar las costas, algo que aún no se ha conseguido. Por lo tanto, de cara al año que viene queremos orientarnos mucho en trabajar con gobiernos o diputaciones para poder repoblar la costa. Más que nada porque cuando tú arrancas el percebe de una roca, en esa roca no vuelve a crecer ningún percebe ", explican.

"Podríamos repoblar las costas marinas para que el percebe no sea un artículo tan de lujo y haya abundancia en el mar. No es tanto querer sustituir al natural sino ayudar a que se siga manteniendo y que no haya escasez en las costas", destacan.