"Gran interés" por parte de las empresas vascas, ayudas que no llegan por la "gestión deficiente" del Estado y menos dinero asignado a Euskadi que el que le corresponde. Esas tres claves resumen la intervención ayer de Miguel Ormazabal, director de Programas Europeos de la consultora Bantec en el foro del Grupo Noticias. Bantec ha elaborado un estudio en el que analiza el peso de la industria vasca en cada uno de los PERTE diseñados por el Gobierno español. Si se extrapola ese porcentaje a los fondos, Euskadi debería recibir 3.600 millones de euros los próximos dos años. Unos fondos que "triplican" los 600 millones asignados cada año.

El directivo de Bantec participó en una pieza de las jornadas sobre la Planificación Estratégica como Clave para la Ejecución de los Fondos. Más allá del reparto de los recursos, Miguel Ormazabal puso el acento también en el retraso por parte del Estado a la hora de abrir las convocatorias y distribuir el dinero.

Bantec "está siendo testigo del gran interés" que han despertado los Next Generation entre las empresas, que están "redoblando su apuesta" en la solicitud de ayudas públicas. También ha detectado la presencia de compañías que hasta ahora no habían apostado por la vía de la subvención pública.

Es un síntoma de la relevancia del programa por su capacidad de transformación y presupuesto, pero "desgraciadamente no se han convocado todos los PERTE que esperábamos". En Euskadi "se han hecho los deberes" tanto a nivel de empresa como de la Administración. En medio de un ciclo marcado por el "alto nivel de incertidumbre" que genera la inflación, los problemas logísticos o la invasión de Ucrania, las compañías "están estudiando" cómo afrontar el futuro, que pasa por reforzar las líneas de innovación.

Dinamismo en las inversiones

En ello está trabajando el tejido productivo vasco, que ha obligado al Gobierno vasco a dotar de más recursos a algunas de sus líneas de ayudas. Además, la "estabilidad política vasca favorece la inversión", subrayó el responsable de programas de la UE de Bantec.

Precisamente, la I+D es la clave para "ampliar cartera de clientes y mercados" y para "atraer y retener talento". Ormazabal destacó que en un momento en que la "resiliencia es una obligación", Euskadi está por delante del resto de comunidades en innovación pero todavía queda "camino por recorrer" porque "podemos llegar al nivel de los líderes europeos", Francia, Alemania, Suecia y Holanda.

El objetivo es ambicioso y en gran medida depende del trabajo en casa, tanto de las empresas como de las administraciones vascas, pero la llegada de los fondos Next supone una "grandísima oportunidad". Sin embargo, la gestión a nivel estatal "está siendo deficiente y no está ayudando a que los fondos lleguen" a las compañías. Por ello, es "crítico agilizar" el proceso y "adjudicar los fondos ya este año, porque en caso contrario no podrán adjudicarse los de los años siguientes".

Del mismo modo, Ormazabal reclamó que el Estado siga las directrices de otros países europeos, que han abierto "ventanillas temáticas" para solicitar las ayudas europeas y "no cargar a las empresas de burocracia".