Kutxabank ha cerrado con éxito una emisión de deuda senior preferente por un importe de 500 millones de euros, con un plazo de amortización de 5 años -no cancelable antes del cuarto-, y una demanda superior a los 1.200 millones de euros.

La emisión ha sido suscrita íntegramente por inversores institucionales nacionales e internacionales de países como Francia, Reino Unido, Alemania, Holanda o Corea.

Según ha destacado Kutxabank, su "elevado nivel de aceptación" se refleja en que la demanda "ha superado ampliamente el importe de la operación, y en que su margen de colocación se ha situado por debajo de otras emisiones similares realizadas recientemente".

El rendimiento de los bonos se ha establecido en 110 puntos básicos sobre mid-swap, referencia utilizada en estas emisiones. La emisión ha contado con una calificación 'A3'/'A-'/'A (low)' por Moody's, Fitch y DBRS.

Las entidades encargadas de la colocación han sido Norbolsa, Barclays, Crédit Agricole, JP Morgan y Santander. La emisión del bono permite a Kutxabank diversificar la oferta disponible de instrumentos de financiación, ampliando la posibilidad de llegar a un número mayor de inversores.

Además, ha añadido Kutxabank, refuerza su "holgada posición de liquidez" ante el próximo vencimiento de las facilidades de liquidez del Banco Central Europeo (TLTRO), y diversifica los vencimientos de emisiones vigentes.

Esta emisión amplía el umbral por encima de los requerimientos MREL para 2024, que ya cumple Kutxabank, tanto por su elevada solvencia -la más alta del sistema-, como por las emisiones computables realizadas en 2019 y 2021, en las que colocó 1.000 millones de euros en bonos Senior No Preferentes.